El Gobierno prioriza la inspección del viaducto paralelo al derrumbado en la A-6 para abrirlo en verano

Pablo González
Pablo González REDACCIÓN / LAVOZ

GALICIA

El Gobierno procederá en los próximos días a demoler los vanos que quedaron colgados en el viaducto que se derrumbó
El Gobierno procederá en los próximos días a demoler los vanos que quedaron colgados en el viaducto que se derrumbó ALBERTO LÓPEZ

Transportes encarga informes externos a distintos expertos en estructuras y geofísica para analizar las causas del colapso. El objetivo es reabrir la circulación en este tramo de la autovía «canto antes»

14 jun 2022 . Actualizado a las 19:18 h.

«Non imos sobre hipóteses, queremos avanzar realidades». Así se manifestó el delegado del Gobierno, José Miñones, sobre la investigación que trata de determinar las causas del derrumbe del viaducto de O Castro en la A-6, un trabajo «complexo» que puede llevar tiempo. De hecho, el Ministerio de Transportes ha encargado informes externos -además de los que elaboran los técnicos gubernamentales- a expertos en estructuras y geofísica para analizar por qué se derrumbó un tramo del viaducto construido con dovelas prefabricadas, una técnica que apenas se utiliza en la actualidad.

Tras una reunión de la comisión autonómica de tráfico y seguridad vial, a la que también asistió la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, el delegado del Gobierno confirmó que se priorizarán las revisiones del viaducto que ya estaba en uso en sentido Madrid y que se ha cortado al tráfico para descartar cualquier tipo de afección. «No momento que exista a garantía de que non ten ningún tipo de afección esperamos abrilo canto antes», aseguró Miñones, de tal forma que se recuperaría la situación de circulación previa al colapso del puente. «Son moitas as incógnitas, hai que ser prudentes e priorizar a seguridade», dijo, y llegó incluso a valorar la posibilidad de que el viaducto que quedó intacto se abriera «antes do verán». Tenerlo listo en la época estival es, no obstante, un objetivo prioritario.

Sin embargo, en respuestas a preguntas posteriores fue más prudente. «Queremos axilizar canto antes a apertura ao tráfico, pero para iso temos que comprobar que todo está correcto nese viaduto», dijo. La inspección de ese puente «vaise priorizar» en paralelo con la investigación de las causas del derrumbe de su hermano gemelo, pero sin frenar el estudio de las causas del colapso. «Traballamos para que a reapertura sexa o antes posible», añadió.

Otras fuentes explicaron que las actuaciones más inmediatas consistirán en demoler las secciones del viaducto que quedaron colgadas de la estructura. Después de esas operaciones se comprobará que no supusieron afección alguna para el viaducto en dirección Madrid y, en paralelo, se inspeccionará con todo detalle su situación estructural para poder reabrirlo con garantías, teniendo en cuenta que soportará más cargas que las habituales si finalmente se decide que los vehículos circulen en los dos sentidos.

El delegado del Gobierno insistió en la importancia de «estudar ben o ocorrido para saber que facer e poder empezar a falar de prazos, avanzar unha planificación». También explicó que los técnicos «están a traballar desde o minuto un e esperamos ter nos próximos días esa planificación sobre as actuacións a realizar».

Miñones recordó que el viaducto no estaba abierto al tráfico, precisamente por las inspecciones periódicas que se hacen en estas estructuras. Gracias a estas revisiones se detectó corrosión en los cables que ensamblan las dovelas. Se cambiaron los ocho cables que sufrían de corrosión e incluso se reforzaron con otros dos, «polo que non se cre que o problema estea aí». También confirmó que no existen grietas en la estructura.

Aunque en principio no se creará una comisión de seguimiento sobre la situación de la A-6, tal y como pedía la Xunta, Miñones adelantó que se establecerá un canal directo de información con el Gobierno gallego, bien a un nivel técnico a través de la Demarcación de Carreteras del Estado, bien a través de la propia Delegación del Gobierno o de altos cargos del Ministerio de Transportes.

En Pedrafita do Cebreiro, el tráfico desviado circula «con normalidade» y se está planteando reforzar la señalización e incluso instalar radares para proteger a los peatones mientras esta situación se prolongue. Los transportes especiales, después de distintas conversaciones con el sector, se realizarán por la A-52 y la AP-9. Se intentará que los desvíos previstos en Santiago para las obras del orbital se coordinen con la situación en la A-6 para evitar otro punto de estrangulamiento.

Por su parte, la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, demandó «información veraz e certezas» sobre las causas del colapso para evitar «especulacións». La conselleira puso el acento en el método constructivo del viaducto de la A-6, recordando que hay otros ejemplos de esta técnica, que ya no se utiliza en la ingeniería actual, en otros puentes de las autovías estatales en Galicia, tanto en la A-6 como en la A-52. Cree que es necesario aclarar si la tipología del viaducto influyó en las causas del accidente.

La técnica constructiva consiste en la unión de dovelas prefabricadas con pretensado exterior, «una estrutura isostática que, polo tanto, non ten un mecanismo secundario de suxeición», explicó la conselleira, que es ingeniera de Caminos. En la A-52 hay otros dos viaductos —Arnoia y Valenzana— que se construyeron de esta forma, y la Xunta cree que deberían inspeccionarse para comprobar su estado, si finalmente se demuestra que la tipología constructiva agravó el riesgo.

Ethel Vázquez también mostró su preocupación por el impacto del corte de tráfico en «sectores estratéxicos» de Galicia.