Francisco Conde, el imprescindible doctor en Económicas que será el número dos de la Xunta de Alfonso Rueda

Ana Balseiro
Ana Balseiro MADRID

GALICIA

Francisco Conde, en un acto celebrado en Ourense hace unos meses.
Francisco Conde, en un acto celebrado en Ourense hace unos meses. Santi M. Amil

Era una de las apuestas de Feijoo para irse a Madrid, donde Conde tiene a su familia, pero decidió seguir en la Xunta y coordinará todo el área económica como vicepresidente primero

15 may 2022 . Actualizado a las 16:30 h.

Francisco Conde (Monforte de Lemos, Lugo, 1968), es Paco para los amigos. Y así se refirió a él el nuevo presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, cuando en su recorrido como candidato a suceder a Alberto Núñez Feijoo, alabó su trabajo al frente de la Consellería de Economía. «Estoy viendo a Paco, reivindico el trabajo de Paco. Hay que estar e el Gobierno para ver todo lo que hace y, si Paco quiere, seguiré contando con él en el Gobierno. Eres imprescindible», aseveró Rueda hace poco más de dos semanas.

Tan imprescindible que Conde, también vicepresidente con Feijoo (vicepresidente segundo se le nombró en el 2020), se convierte en el nuevo coordinador de todas las consellerías económicas del gabinete de Rueda. Asciende como vicepresidente primero. 

El salto a la primera línea política de alguien extremadamente discreto lo dio en el 2009, pero fuera de los focos. Se convirtió en asesor de Feijoo para asuntos económicos cuando este llegó a la Xunta. Desde hace años les une una fuerte amistad más allá de la política. En el 2012 se le nombró conselleiro de Economía, relevando a Javier Guerra. 

Doctor en Economía de la empresa por la Universidad Complutense, desde 1995 fue profesor de Estructura económica en la también madrileña Universidad CEU San Pablo. Durante aquellos años también fue director del Instituto Robert Schuman de Estudios Europeos, además de vicedecano de la Facultad de Economía y director y vicerrector de Relaciones Internacionales. 

Porque es a Madrid a donde este lucense está profundamente vinculado, ya que allí reside su familia: su mujer, periodista, y sus dos hijos. Y a la capital de España va prácticamente todos los fines de semana. 

Sin embargo, Conde ha demostrado ser —como aseguró Rueda— «imprescindible» en el Gobierno autonómico. Así, pese a haber tenido la oportunidad de regresar a Madrid, otra vez de la mano de Feijoo (era otra de las personas con las que contaba el ya presidente del PP), ha seguido en Galicia. Y eso que el propio Feijoo lo incluyó en la junta directiva nacional del partido tras el congreso de los populares en Sevilla. 

Conde se queda manteniendo la misma implicación que mostró con los empresarios durante los peores momentos de la pandemia. Decidió quedarse en Galicia «por responsabilidad», como ha dicho siempre en privado, haciendo gala de esa discreción que le ha llevado al segundo puesto en la jerarquía del Gobierno autonómico. Sus retos serán la coordinación y gestión de los fondos europeos que lleguen a Galicia y la recuperación de la industria tras los palos de Alcoa, Vestas, Barreras o el cierre de las térmicas.