En resumen, el objetivo del programa que desenvuelve Igaxes desde el 2005 (puesto en marcha en 1998 y financiado con fondos europeos y de Política Social) es acompañar y ayudar a quien no cuenta con un respaldo que sí tienen otros. En palabras de Carlos Rosón, la idea es «acelerar os tránsitos porque non contan un colchón familiar».
Acabar con los estigmas
Otro de los objetivos de Igaxes es acabar con los estigmas que hay sobre quien pasa por un programa de protección. Para ello, explica su director, ponen en marcha campañas de comunicación y hacen mucha pedagogía: «Estes rapaces son heroes e hai que dicilo así porque con 16 e 17 anos xa teñen que buscarse a vida. Ás veces a xente confunde, pero un centro de protección non é un centro de reforma. Ao contrario, estes rapaces son vítimas», concluye.