La gratuidad de las escuelas infantiles el próximo curso dispara las solicitudes

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Sandra Alonso

Algunos centros privados ya no tienen plazas disponibles a estas alturas

09 jul 2023 . Actualizado a las 21:09 h.

En abril del 2020, la Xunta implantó la gratuidad de las escuelas infantiles en los segundos hijos y sucesivos. La medida se aplicó en todos los centros, públicos y privados, de titularidad municipal o autonómica. En octubre del 2021, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, anunció que esta gratuidad se ampliaría a todas las familias a partir del próximo curso 2022-23.

Con los plazos de admisión abiertos en casi toda la red de centros, públicos y privados, las guarderías admiten que la demanda se ha disparado. En Popote, una escuela bilingüe del concello de Teo, aseguran que en general todas las privadas están recibiendo más solicitudes. Los padres llaman para informarse porque aún tienen dudas sobre la gratuidad, pero el número de matrículas ya está subiendo en relación al curso actual.

Ana Verdes, de uno de los centros de Cativos de la capital gallega, asegura que «hai moito interese», preguntas, y solicitud de información sobre esta gratuidad. Uno de los aspectos que destaca Verdes es que la mayor demanda se registra en los grupos que habitualmente tienen menos, es decir, los de 0 a 1 año y de 1 a 2. En el primero de los casos, el de los niños más pequeños, suele haber vacantes durante todo el curso, por lo que si una familia quiere matricular a su hijo en marzo o abril todavía tiene plazo. Pero de cara al 2022-2023 «danos a impresión de que se van encher todas as prazas».

Beatriz Iglesias, presidenta de Agadei, la Asociación Galega de Escolas Infantís, confirma lo que argumentan sus compañeras, hay más demanda y más matrícula. «Los padres preguntan y al ser gratuita la atención educativa las familias se animan, aunque solo sea esas horas». La situación de las escuelas infantiles depende no obstante de las zonas, y mientras en las ciudades hay guarderías que ya han reservado todas sus plazas, en otros concellos quizás no, «pero evidentemente sí que se nota».

«Hay muchísimas más reservas, tenemos centros en Santiago y A Coruña que ya no tienen plazas», explica Paula Gundín, la directora de los centros Pequerrechos, una veintena en la comunidad. La responsable de estas escuelas estima que los padres se ahorrarán unos 2.500 euros al año, «y en estos momentos, tal y como está la cesta de la compra y el coste de los suministros, es un alivio». Defiende además que la gratuidad se aplique a todas las guarderías, públicas y privadas, porque se encontraban a familias que querían elegir su proyecto educativo pero optaban por la red pública por una cuestión económica. La educación de 0 a 3 años, defiende, es muy relevante para los menores, no solo para favorecer la conciliación de las familias sino para fomentar la socialización de los pequeños.

La medida beneficia a 30.000 familias y cuenta con una inversión de 30 millones

El 2022-2023 será el primer curso en el que todas las escuelas infantiles sean gratuitas para todos los niños de 0 a 3 años. Galicia es la primera comunidad en aplicar esta medida que, según la Xunta, beneficiará a unas treinta mil familias con una inversión de treinta millones de euros. La Consellería de Política Social estima que el ahorro por menor será de 1.900 euros al año, aunque en las privadas esta cifra se incrementa.

Sin ningún trámite

Al igual que ocurrió cuando se implantó la gratuidad en el segundo hijo y sucesivos, las familias no tienen que hacer ningún trámite a mayores. Son los centros privados, los de titularidad municipal o los de iniciativa social los que se adhieren a este sistema, y la Xunta asume el coste que antes pagaban las familias en matrícula y atención educativa, igual que lo hará en sus propios centros. Los padres sí seguirán asumiendo el coste de prestaciones como el comedor u otros servicios complementarios.

Esta medida no solo beneficia a los niños, sino también a la red de centros privados, ya que los padres pueden optar por estas escuelas en primera opción en las mismas condiciones económicas. Hasta ahora la red pública no era gratuita, pero el coste, en función de la renta, solía ser inferior.