Las constructoras plantean crear una red de recarga eléctrica cada 50 kilómetros con los peajes de las autovías

GALICIA

La electrolinera en la que se produjo el repostaje viral es, curiosamente, una de las pioneras de Galicia: se inauguró hace casi un año. Se trata de la Galp de Lapido (Ames)
La electrolinera en la que se produjo el repostaje viral es, curiosamente, una de las pioneras de Galicia: se inauguró hace casi un año. Se trata de la Galp de Lapido (Ames) PACO RODRÍGUEZ

Seopan defiende el cobro según los kilómetros recorridos y rechaza un canon temporal con tarifa plana

17 mar 2022 . Actualizado a las 13:38 h.

Las grandes empresas constructoras nacionales agrupadas en la organización Seopan defienden la implantación de peajes en las autovías de toda España como método para financiar el mantenimiento de la red de carreteras y modernizarlas. El presidente de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras, Julián Núñez, desveló hoy que su organización ultima la redacción de un plan que será presentado al Gobierno en el que además de apoyar los principios de «quien utiliza paga» y «quien contamina paga» mediante los citados peajes, solicita que estos sean destinados a dotar los viales de alta capacidad de un servicio de recarga rápida de electricidad que plantean tenga un punto de repostaje cada 50 kilómetros. Según dicho plan, se instalarían 160 estaciones de recarga eléctrica para que se garantice la plena movilidad por todo el territorio de los vehículos de alimentación mediante baterías. 

Concretan las grandes constructoras que cada estación de recarga debería contar con un mínimo de doce plazas de repostaje de velocidad ultrarrápida (350 kilovatios) conectados a la red de alta tensión. Dicha red permitiría, según las proyecciones hechas por Seopan, ofrecer unos precios de recarga inferiores a los actuales. 

La recaudación de los peajes, según Núñez, no debe de ser una mera sustitución de la fuente de financiación de las obras de mantenimiento de la red viaria, pasando de pagar las administraciones a que lo ha el usuario, sino que debe de aportar, a su juicio, cantidades suficientes para abordar la transición de las grandes carreteras españolas a un escenario de total conectividad de datos, automatismos en la conducción, mejora medioambiental, eliminación de ruidos y dotación de áreas seguras para los transportistas. 

Julián Núñez asegura que con el modelo que maneja Seopan, el pago de un peaje para un vehículo eléctrico sería más barato que hacerlo actualmente sin peajes pero con un coche de combustión. La posición de los empresarios de la construcción es contraria, eso sí, a que se adopte el modelo de la viñeta para cobrar por usar las autovías, como ya hacen nueve países europeos con precios que varían entre 10 y 180 euros anuales. Las firmas constructoras prefieren que la tasa que se imponga, se regule en función de los kilómetros que se hagan en cada desplazamiento, con un precio fijo por cada uno de ellos. 

Seopan, que destaca que España tiene la cuarta red de carreteras de alta velocidad más extensa del mundo, tras China, Estados Unidos y Canadá, lo contrapone con su afirmación de que sea el país con menor porcentaje de kilómetros sometidos al pago de peajes, volumen que señala es del 12,5 %. En la actualidad quedan en todo el Estado 2.161 kilómetros de autopistas de pago tras eliminarse 1.097 en los dos últimos años, cuyo coste de mantenimiento a cargo de las arcas públicas calcula en 460 millones al año.