El efecto dispersión obliga a Galicia a costear 343 colegios y 239 centros de salud más que la media de España

GALICIA

La ministra de Hacienda, ayer en el Senado
La ministra de Hacienda, ayer en el Senado Javier Lizon / Efe

La Consellería de Facenda remite sus alegaciones al Ministerio pidiendo una compensación en el nuevo modelo de financiación

01 feb 2022 . Actualizado a las 20:57 h.

Valorar de manera precisa el efecto dispersión y cuantificar los sobrecostes que provoca el tener que acercar los servicios fundamentales a una población muy diseminada es uno de los desafíos que tiene el Gobierno gallego para abordar la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica, que está llamado a reemplazar al que quedó caduco en el 2014. En el pliego de alegaciones remitido por la Xunta al Ministerio de Hacienda se cifra en 513 millones de euros el sobrecoste de esa dispersión, que obliga a la comunidad a habilitar y financiar hasta 343 colegios y 239 centros de salud más que la media española.

El sistema de financiación también tiene instrumentos para amortiguar el efecto dispersión, al que se aplica una ponderación del 0,6 %, que le permitió a Galicia recibir por esta vía una compensación de 252,75 millones de euros. Es en torno a la mitad de lo que se ha desembolsado, de ahí que la Xunta refleje esto en sus alegaciones: «La variable dispersión debe incrementarse, y su ponderación llegar al menos hasta el 1 %, y así reflejar los verdaderos costes diferenciales». El caso es que, con esa corrección del 1 %, la compensación a Galicia se incrementaría hasta el entorno de los 420 millones.

La Consellería de Facenda baja al detalle del cálculo de costes de los servicios fundamentales. Empezando por la educación, señala que la mitad de los centros de infantil y primaria se ubican en concellos de menos de 2.000 habitantes, cuando la media del resto de comunidades está en el 22,3 %. Es más, si Galicia tuviera a misma ratio de colegios por cada 100.000 habitantes que el resto de España, «tendríamos 343 centros menos», explica Facenda. Financiar este exceso de equipamientos supone un desembolso de 241,9 millones de euros al año (216,8 en gastos de personal y 25,1 más en gastos de funcionamiento). A ello hay que añadir el sobrecoste de transporte escolar (87,5 millones), pues su uso en infantil y primaria en Galicia seis veces superior al resto de comunidades. Y también el gasto adicional en comedores escolares (25,2 millones).

En el apartado de sanidad, el documento remitido al Gobierno parte de la base de que en España hay una media de 64,4 centros de salud por cada millón de habitantes, cifra que en Galicia se va hasta los 147,4 dispensarios. El Servizo Galego de Saúde tendría 239 centros de salud menos de tener la ratio española y se ahorraría por este concepto un sobrecoste de 53,5 millones de euros (33,6 en gastos de funcionamiento y 19,9 en gastos adicionales de personal).

En las alegaciones remitidas por el conselleiro Miguel Corgos a Hacienda también se analizan, más allá de la dispersión, otras variables correctoras de carácter geográfico o demográfico a tener en cuenta a la hora de fijar el reparto de fondos a las comunidades. Es el caso de la superficie, que interesa a comunidades con mucho territorio y poca población, como Castilla-La Mancha o Aragón; la despoblación, la orografía (que invoca Cantabria), o la insularidad.

El Gobierno gallego defiende que las variables a utilizar se deben «asociar con las personas y su distribución», pues de lo que se trata es de calcular el coste efectivos de los servicios que se prestan a ciudadanos y no tanto a territorios. Y en todo caso, recalca la Xunta que «las nuevas correcciones no pueden suponer, en ningún caso, una reducción del efecto de las ya existentes» y que la dispersión llegue a pesar en el sistema menos que ahora.