Ambas plataformas recogieron casi 350 firmas en un tiempo récord con la idea de hacerlas llegar antes del 21 de diciembre, cuando estaban previstos los cambios. Entre los firmantes figuraban profesionales de todo tipo: ámbito sanitario, educación, banca y profesiones liberales. Alegan que llegan tarde al trabajo por los horarios y retrasos de los trenes.