El Sergas no logra consolidar la consulta presencial en los centros de salud

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

GALICIA

Centro de salud en Barbanza
Centro de salud en Barbanza CARMELA QUEIJEIRO

La sexta ola reduce la cita en persona al 39 %, lejos del objetivo del 60 %

13 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La progresiva recuperación de la atención presencial en los centros de salud de Galicia ha dado un importante paso atrás en el tramo final del 2021. Tanto, que el Servizo Galego de Saúde se ha quedado lejos de cumplir el objetivo que se había marcado, de que como mínimo el 60 % de las consultas con los médicos de familia fuesen cara a cara. «A media está agora no 39 %», reconoce una portavoz de la Consellería de Sanidade.

La consellería resalta que iba por el buen camino y que en noviembre ya se había llegado a una media del 60 % de las consultas presenciales con los médicos de familia en toda Galicia, pero que «a chegada da sexta vaga [de la epidemia de covid-19] levou aos pacientes e aos profesionais a elixir a cita telefónica na súa maioría debido á explosión de positivos».

Diciembre empezó con 5.800 pacientes de covid monitorizados desde atención primaria y concluyó con 41.500 con el mismo personal. A eso se sumaron muchas bajas de los propios profesionales. Al terminar el mes el Sergas cambió el protocolo para que los facultativos solo hagan dos llamadas a cada enfermo: una para la baja y otra para el alta, pero durante todo el mes tenían que hacer, en teoría, llamadas como mínimo en días alternos a todas las personas con coronavirus de su cupo. Como los diagnosticados de covid tienen que estar aislados en sus casas, el seguimiento siempre es telefónico.

Que actualmente la media sea del 39 % quiere decir que muchos médicos están por encima y que muchos otros están por debajo. Pero hay un matiz: el objetivo del Sergas no era llegar al 60 % de media, sino que cada uno de los médicos de Galicia superase el 60 % en el conjunto de los tres últimos meses del año.

A cada facultativo se le marcan unos objetivos cada año y de su cumplimiento depende la percepción de un plus de 2.400 euros anuales. Firmarlos es voluntario, pero si no se firman, no se percibe el llamado complemento de productividad variable.

La presencialidad pesa un 10 % en ese complemento. El Sergas no ha aclarado si se va a retirar ese punto de los objetivos o se va a penalizar a los médicos en su salario. La mitad del plus se cobra mes a mes, como cantidad fija (100 euros) y la otra mitad queda para la evaluación de los objetivos que se hace al terminar el año. Cuando La Voz dio a conocer que el Sergas imponía este objetivo, los colegios médicos gallegos reclamaron a la Consellería Sanidade que lo retirase, porque su cumplimiento no depende del doctor.

El Sergas empezó a recuperar la consulta presencial en la segunda mitad de septiembre. Hasta entonces, el ciudadano que pedía cita a través de la central telefónica, de Internet o de la aplicación móvil solo podía solicitarla telefónica. Además, las agendas de los médicos recogían pocos huecos de atención presencial, menos del 60 %, así que aunque ellos mismos quisieran ver a todos los pacientes no podían. Esto se modificó a mediados de septiembre, después de un año y medio de pandemia. En ese momento se implantaron las llamadas agendas de calidad, un método de trabajo para organizar la asistencia en la consulta, que recoge un máximo de cinco pacientes sin cita. La realidad la ha superado.

Feijoo confía en que los médicos sin especialidad alivien la primaria de burocracia

El presidente de la Xunta defendió ayer en Carballo el plan de la Consellería de Sanidade para contratar a médicos sin especialidad de manera temporal para aliviar la carga burocrática de la atención primaria «al menos durante las próximas semanas». Ese plan contempla que titulados en medicina que no han obtenido una especialidad a través del sistema MIR se apunten para firmar un contrato con el Sergas con las funciones de técnicos de salud, que consistirán en aliviar de burocracia a los médicos de los ambulatorios. Sanidade reconoció a La Voz que los contratos serán de solo dos meses (con una retribución de 3.000 euros mensuales). Pueden apuntarse hasta el día 24.

Los facultativos sin especialidad no pueden ejercer en el sistema público. Su función, según Alberto Núñez Feijoo, será «desbloquear altas y bajas». Será el doctor de cabecera el que prescriba la baja y, después, el técnico de salud el que haga la tramitación. El presidente recordó que cada día se están gestionando en la comunidad entre 5.000 y 6.000 bajas en Galicia por los nuevos positivos de covid-19 (más de 8.000 ayer).

Feijoo también trasladó al Gobierno central toda la responsabilidad sobre la falta de refuerzos de la atención primaria: «Hemos pedido un incremento de médicos en formación para poder atender los problemas derivados de la falta de facultativos, pero no hemos sido, no sé si escuchados, pero no atendidos en nuestras propuestas».