Coche automatizado. Los avances tecnológicos están permitiendo el desarrollo de vehículos que plantean distintos niveles de automatización, hasta llegar a la conducción sin intervención del ser humano. La nueva ley recoge las bases para ese futuro más o menos inmediato y que necesitará un marco normativo que supera al actual. Por eso se incluye que el titular de un sistema de conducción automatizada deberá comunicar en el registro de la DGT las capacidades y el diseño del sistema operativo, así como garantizar su permanente actualización.
Más cambios. La ley de tráfico que entrará en vigor en marzo también será más dura con quienes cometen fraude en los exámenes de conducir, a los que impedirá presentarse durante seis meses. También aumenta el castigo (ahora con 6 puntos) para los que arrojen colillas u otros objetos puedan causar incendios o accidentes. Al tiempo, la norma premiará con puntos extra a quienes mejoren su destreza con cursos de conducción segura.