Los peajes subirán el 2 % desde enero, y el Estado asumirá otro 1 % en la AP-9

Carlos Punzón
carlos punzón VIGO / LA VOZ

GALICIA

Peaje de la AP-9 en Pontevedra, en una imagen de archivo.
Peaje de la AP-9 en Pontevedra, en una imagen de archivo. CAPOTILLO

Ir de Ferrol a Tui rozará los 23 euros, y 6,15 en la AP-53 de Santiago a Dozón

13 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La evolución del IPC dicta una nueva sentencia sobre los precios de los peajes de las autopistas para el año que viene. Si en este 2021 prácticamente todas las concesionarias optaron por congelar sus tarifas al registrarse un índice de precios interanual del -0,11 %, en el 2022 se habrá disipado dicho efecto, volviendo a la senda del encarecimiento: subirán alrededor del 2 %.

La evolución en el precio de los peajes está determinada por el cálculo de la media del IPC general de los últimos doce meses sobre igual período del año anterior. Es decir, se calcula el índice de precios entre noviembre del 2020 y octubre del 2021 por un lado, y el de noviembre del 2019 y octubre del 2020 por otro. La media entre ambos parámetros es lo que establece el porcentaje de subida o bajada del siguiente ejercicio. El resultado es un incremento de precios del 1,97 % desde el 1 de enero. Cada concesionaria aún podrá corregir dicha tasa según se haya comportado el tráfico en su autopista. Y como la práctica mayoría aún no ha alcanzado los niveles de usuarios previos a la crisis del covid, casi todas las concesionarias solicitarán una compensación al alza en sus tarifas, que las llevará a incrementarlas en dos puntos como poco.

El sector protagonizará así a partir del 1 de enero la mayor subida en los peajes desde el año 2013, cuando se habían encarecido un 2,4 %. Además, en Galicia, la AP-9 suma otro condicionante que la volverá a convertir en cuarto año consecutivo en la autopista que más subirá sus tarifas de toda España. Al índice general del sector habrá que sumarle otro 1 %, ese extra que desde el 2018 aplica Audasa para recuperar los 228 millones gastados en la ampliación del puente de Rande y la circunvalación de Santiago.

En los presupuestos

Pero ese segundo concepto de subida no lo notarán los conductor. Será asumido por la Administración vía presupuestos del Estado por la Administración, según aseguraba ayer el Ministerio de Transportes. El real decreto que regula desde el verano pasado las rebajas establecidas en la AP-9 contempla dedicar los importes que no se empleen en dichas bonificaciones «a reducir la cuenta de compensación» que hace subir las tarifas de la AP-9 más que las del resto de las concesiones del Estado. Pero si en el futuro los fondos públicos reservados no fuesen suficientes para hacer frente más que a las bonificaciones, pasarían a ser los usuarios quienes tendrían que hacerse cargo del 1 % extra que todos los años seguirá subiendo hasta el 2038 los precios de la AP-9.

A falta de que el ministerio apruebe las tarifas para el nuevo año de cada concesionaria, la subida que se cierne sobre el vial que une Ferrol y Tui llevará sus precios para vehículos ligeros a alrededor de 22,75 euros, 0,45 más que en la actualidad. De Vigo a A Coruña subirá hasta 17,30 euros (0,30 más que ahora); y de A Coruña a Santiago se incrementará otros 15 céntimos para pasar a costar 7,15 euros.

Estos serán los precios tanto para los viajes de ida como para los de vuelta para quien no paguen con telepeaje o no retorne en menos de 24 horas respecto al viaje inicial. La Administración central se hace cargo de los peajes de vuelta de los que abonen las tarifas con dichos dispositivos, y del 20 % de todos los viajes de los transportes pesados, partidas a las que el año que viene destinará 54,9 millones de euros.

En el caso de la AP-53, la subida llevará el viaje de Santiago al Alto de Santo Domingo (Dozón) a 6,15 euros, frente a los 6,05 que cuesta ahora. Esta es la única autopista de España en la que no se ofrece descuento alguno, ni a los usuarios frecuentes ni por el uso de telepeajes o realizar más de un viaje al día.

Las dos autopistas autonómicas (A Coruña-Carballo y Vigo-Baiona), dos de las más baratas de España, se rigen por un método de cálculo diferente, y su cálculo aún no está cerrado.

El encarecimiento llega mientras se última el plan para cobrar en las autovías

La subida de los precios de las autopistas llega en medio de la crisis abierta en el sector del transporte, el encarecimiento de los combustibles y el debate que ha propiciado el Gobierno con su intención de cobrar a corto plazo a quienes utilicen las autovías. La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y el resto de los altos cargos de su departamento tratan de asegurar que nada se hará en ese campo sin el consenso de partidos políticos, autonomías, y agentes económicos, especialmente los del sector del transporte. Pero al mismo tiempo se suceden las referencias que avanzan cómo podría ser esa tarifa que el Ejecutivo se ha comprometido con la UE a adoptar como una de las medidas de modernización y sostenibilidad a cambio de los fondos de recuperación habilitados por la crisis sanitaria del covid.

El pasado octubre, La Voz desveló que Transportes baraja una doble modalidad de cobro. Un canon durante dos o tres años (viñeta) y que es una suerte de tarifa plana que permitiría circular por las autovías según el importe contratado, que puede ser días, meses o un año, como ocurre en los nueve países del continente que han optado por dicho sistema. Este se sustituiría por otro tipo de peaje basado en control de matrículas o satelital cuando los mecanismos tecnológicos lo permitiesen.

El Gobierno se ha cuidado en no señalar oficialmente cuál sería el precio por kilómetro de dichos peajes, pero con el anterior ministro de Transportes, José Luis Ábalos, llegó a trascender que sería de un céntimo para vehículos ligeros. Con ello, viajar de A Coruña o Vigo hasta Madrid rondaría los 6 euros.

La Xunta conmina al Gobierno a revisar el contrato de Audasa

La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, reclamó ayer al Gobierno que revise sus acuerdos con Audasa tras los dictámenes contrarios a su beneficios y subidas de sus peajes. La conselleira recibió al presidente de En Colectivo, Diego Maraña, que pidió un posicionamiento de la Xunta ante el dictamen que la UE emitió tras una denuncia suya contra las prórrogas otorgadas a la concesión.