El Gobierno avisa que ya es «imperativo» cobrar peaje en las autovías

GALICIA

Manuel Bruque

La secretaria de Estado de Transportes avanza que ultima un modelo de «pago por uso» para recaudar fondos para la conservación de la red viaria y considera que los gallegos son «rehenes» de la AP-9

15 feb 2022 . Actualizado a las 17:46 h.

Aunque surgió como una propuesta a debatir y consensuar con partidos políticos y el sector del transporte, la suerte sobre la implantación de peaje en las autovías en España semeja que ya está echada. La secretaria de Estado del Ministerio de Transportes, Isabel Pardo de Vera, dejó claro en Pontevedra que el Gobierno tiene plena intención de implantar el cobro en las carreteras de alta capacidad para obtener fondos extras con los que afrontar la conservación de la red viaria. Tras señalar que los presupuestos del Estado reservan para el próximo año 1.371 millones de euros para mantenimiento y reparación de las carreteras estatales, Pardo de Vera advirtió que «es imperativo que demos un paso más y pongamos en marcha los cambios administrativos que se nos demandan desde Bruselas», dijo en la apertura del Simposio Nacional de Vías e Obras da Administración Local organizado por la Diputación pontevedresa.

La política lucense aseguró que en Europa ya se recaudan al año 10.000 millones de euros por tasas de uso (viñeta) y peajes sobre las carreteras, en una relación que cifró en un 60 y 40 % respectivamente. «¿Alguien puede entender que los camiones españoles paguen en todas las carreteras europeas y los extranjeros utilicen gratuitamente la magnífica red de autovías españolas?», se preguntó la secretaria de Estado. Y se respondió ella misma al anunciar que el Gobierno está trabajando ya en un modelo de pago por uso «que ofrecerá una solución para el creciente déficit en conservación de la red de carreteras de alta capacidad».

Fuentes del Ministerio de Transportes avanzaron la semana pasada que el Gobierno podría optar de entrada por la implantación de un canon a los automovilistas que quieran circular por las autovías, tarifa que tendría un plazo de vigencia como en los países donde está implantada la viñeta de uso semanal, mensual o anual. Como es un sistema del que recela la UE al preferir que se cobre por distancia recorrida, a medio plazo se sustituiría en España por un sistema de control tecnológico, basado en dispositivos de telepeaje o en la huella digital que se crearía para cada vehículo y que reflejaría su antigüedad, combustible e incluso edad del conductor habitual y cargas familiares.

El Gobierno anunció a la Comisión Europea su intención de implantar peajes en las autovías en el 2024 como uno de los compromisos a cambio de los fondos que Bruselas destinará al país para remontar la crisis causada por el coronavirus.

Cautivos de la AP-9

En su defensa del cobro por uso en las autovías Pardo de Vera manifestó en Pontevedra que solo se podrá evitar de dos formas: a través de los presupuestos del Estado o recaudando a través de los peajes clásicos como los de las autopistas, que reconoció están «desequilibrados en nuestro territorio, generando profundas brechas de oportunidad». En ese punto, la secretaria de Estado echó mano de la AP-9 gallega para aludir a la prolongación de su concesión hasta el 2048 «por decisiones que nos han dejado rehenes de su gestión. O afrontamos el cambio o seguiremos cautivos de un sistema tan injusto como lucrativo para algunos», dijo sin desvelar si el nuevo modelo que ultima el Ministerio de Transportes cambiaría las tarifas de autopistas como la gallega o estas quedarían al margen del sistema que se pretende implantar en las autovías.

Once países de Europa cuentan con un canon para vehículos ligeros exigido para circular por las vías de alta capacidad, y otros tantos estados lo exigen además solo a los transportes pesados.

Un método que ya se planteó Borrell y el PP y que Ábalos aseguró que no era obligatorio

La cúpula del Ministerio de Transportes aduce que el pago por uso en las autovías se ha planteado internamente desde la época en la que Josep Borrell fue ministro de Obras Públicas en la primera mitad de los años noventa. Antes de dejar el actual Ejecutivo, José Luis Ábalos aseguró en todos los foros en los que intervino para hablar del mantenimiento de la red viaria que la única propuesta formal para cobrar en las autovías se hizo cuando Ana Pastor era ministra de Fomento, cuestión que abordó también su sucesor, Íñigo de la Serna, con un estudio específico. «Tranquilidad, no tenemos propuesta alguna», señalaba aún en abril, defendiendo que se revisasen las posibilidades, «y si no quieren, pues no pasa nada», clamaba incluso en el Congreso ante el rechazo de la oposición a extender los peajes.

Su sucesora al frente de Transportes, Raquel Sánchez, ha marcado desde su toma de posesión una postura decidida a favor del cobro por uso. «Parece que en este país se ha alargado demasiado la toma de decisiones», terció hoy Isabel Pardo de Vera. En su intervención trató de hacer ver que mantener que es gratis circular por las autovías es «demagogia», pues se mantienen e costa de los presupuestos del Estado «en detrimento de reforzar el aseguramiento de la sanidad, la educación o la justicia», dijo para subrayar que los usuarios del tren, avión, barco o agua ya pagan cánones por uso.