La transformación política del conselleiro de Sanidade: de no militar a coordinar el PP vigués en tres meses

GALICIA

Julio García Comesaña es conselleiro desde hace un año.
Julio García Comesaña es conselleiro desde hace un año. PACO RODRÍGUEZ

Comesaña asegura que no se ve «en absoluto» como candidato a la alcaldía de Vigo

21 sep 2021 . Actualizado a las 21:37 h.

El PP de Vigo hierve. Pese a no registrar actividad interna desde principios del mes de julio, llevar más de dos años en manos de una gestora o contar con solo 4 concejales de los 27 de la corporación municipal, la familia popular olívica se encuentra en estado de ebullición tras el congreso provincial del partido celebrado el sábado. Toca posicionarse ahora ante el cónclave local, todavía sin fecha y para el que la dirección del PPdeG pide «unidad, unidad y unidad» temerosa de que las palpables rencillas de Vigo generen problemas hacia arriba. «Un congreso es útil si sirve para unir al partido. Si se usa para despedazarnos en público, si se usa para conspiraciones en privado, el congreso solo sirve para dañar al partido», avisó el presidente Alberto Núñez Feijoo el pasado sábado durante el cónclave del PP pontevedrés en una alusión que la mayoría entendió que estaba dirigida a los populares vigueses.

Y para tratar de apagar el eterno incendio del partido en Vigo, el líder de la formación y el presidente del PP de Pontevedra, Alfonso Rueda, echan mano de un experto en afrontar conflictos: el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña. Radiofísico de profesión que se estrenó en gestión sanitaria con el bipartito tras ser delegado sindical de UGT, se hizo visible en el ámbito público cuando fue designado para resolver una crisis de facultativos recién arrancado el hospital Álvaro Cunqueiro. Similar cometido lo llevó a dirigir después el área sanitaria de Ourense, luego la de Vigo, y ya en el 2020 Feijoo le encomendó lidiar con la gestión del coronavirus en Galicia. Hace solo tres meses que se hizo militante del PP y de inmediato pasó a dirigir el área sanitaria en el partido.

«Es un valor en alza», coinciden los diferentes sectores del Partido Popular de Vigo en el momento de analizar el camino que tiene por delante García Comesaña, que fue designado este fin de semana coordinador del PP en la comarca viguesa. El sector mayoritario ve al conselleiro como un refuerzo definitivo a la candidatura a la presidencia local del partido de Marta Fernández-Tapias, delegada de la Xunta en la ciudad. Con ambos como referentes dudan de que fructifiquen discrepancias en forma de otras candidaturas. La exalcaldesa y parlamentaria Corina Porro lo ha llegado a señalar incluso como opción para presidir el Partido Popular vigués o ser el candidato de la formación a la alcaldía.

«No soy una nueva opción»

«No me veo en absoluto como candidato, no me veo en ningún sentido», aseguraba ayer a La Voz el propio conselleiro. «No soy una nueva opción. Soy de todos y de ninguno en particular», añadía desde esa encomienda de aterrizar en Vigo para pacificar y no echar más gasolina al fuego.

«Tiene ambición política, pero no se le nota», tercian desde uno de los flancos del partido desde el que se advierte que designarlo candidato a la alcaldía sin más, sin conocer el partido, sería reproducir el error que dejó al PP con solo cuatro ediles en el Concello de Vigo. «El conselleiro ha caído muy bien entre la militancia, se explica bien, se implica, es dispuesto, pero está verde en política», apuntan desde otro flanco, haciendo ver que Abel Caballero ya no trata al conselleiro con la misma condescendencia desde que este se hizo militante del PP y empezó a sonar en Vigo.

«Nadie puede hablar mal de él en el partido», sostienen desde un tercer sector del PP, desde el que se entiende que Comesaña ha sido elegido para poner paz, pero que a día de hoy tendría difícil evitar que se consume una segunda candidatura encabezada por el exconselleiro, senador y vicepresidente de la gestora local, Javier Guerra.