Feijoo exige implicación a los alcaldes gallegos para evitar brotes como el de Mallorca

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO

GALICIA

Cree que el problema estuvo en el «incumprimento sistemático das normas» y que con mascarillas y distancia de seguridad no se hubiera producido

01 jul 2021 . Actualizado a las 15:18 h.

El presidente de la Xunta defendió este jueves las normas establecidas para la reapertura del ocio nocturno y las medidas para la celebración de actividades, pero considera que para que todo funcione se deben seguir cumpliendo dos máximas: en espacios interiores, mascarilla y distancia de seguridad; y en exteriores, o una cosa o la otra. «Se cumprimos as normas temos un nivel de seguridade alto, e se non o facemos, a seguridade desaparece e os contaxios multilplícanse». Con esta valoración reaccionó Alberto Núñez Feijoo al brote que se originó en Palma de Mallorca y que ha acabado afectando a varias comunidades, incluida Galicia: «Houbo un incumprimento sistemático das normas», valoró el líder autonómico, que considera sorprendente que se pudiera celebrar un concierto en una plaza de toros en los que todas las medidas saltaron por los aires y que, a continuación, las fiestas continuasen en el paseo marítimo de la capital balear y en las playas.

Feijoo reconoce que desde el punto de vista hospitalario «non hai preocupación» por esta situación, pero sí por los posibles contagios que puedan generar actitudes similares en Galicia. Por ello hizo un llamamiento a los alcaldes y a las fuerzas de seguridad para que eviten a toda costa las reuniones para beber en la calle, entre otras cosas porque «están prohibidas». Este viernes se celebrará una reunión encabezada por el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y en la que habrá responsables de seguridad para tratar de implantar alguna medida preventiva que evite los botellones, una realidad que se está produciendo en determinadas localidades, aunque evitó citar nombres. «Como veciño de Galicia vexo concentracións ilegais, e hai xente que chama para denuncialas e non reciben atención ou chega moi tarde», lamentó, para a continuación reconocer que los profesionales de la hostelería son los grandes perjudicados por esta circunstancia, y por ello pidió que cada parte implicada asuma sus competencias y responsabilidades. 

El titular de la Xunta cree que el brote de Mallorca no debe servir para elevar el tono de los reproches entre las comunidades autónomas, pero sí tiene claro que hay responsabilidades para evitar una fiesta que «tiña que interrumpirse». En concreto, recordó que el descontrol en las playas sería competencia de las policías municipales, con auxilio de las nacionales; y en cuanto al cumplimiento de los protocolos, aseguró que la gestión le corresponde al Gobierno autonómico, al margen de las respuesta que deban dar los organizadores de actos públicos.