Tráfico permite desde este jueves que la baliza luminosa de peligro se use en lugar de los triángulos

Los triángulos de señalización de peligro podrán ser sustituidos a partir de hoy por las balizas luminosas destinadas a advertir la presencia de un vehículo inmovilizado en la vía pública por avería o por accidente. La regulación de ese dispositivo luminoso se incluye en el real decreto que entre en vigor hoy y que regula por primera vez los servicios y la forma de trabajo de las grúas de auxilio en carretera. Tráfico informó de que desde hoy está permitida la utilización de ambas señales, conocidas técnicamente como V-16, juntas o por separado. Ese período de convivencia entre ambos dispositivos de emergencia se extenderá hasta el 1 de enero del 2026, cuando solo estará permitida la baliza luminosa, con la que se pretende evitar el riesgo de atropello existente al bajarse del coche para colocar los triángulos en la carretera.

En lo que se refiere a la baliza luminosa, la nueva regulación autoriza su uso y establece cómo debe utilizarse y cuáles son sus características. La activación de la señal indica, al igual que los triángulos, que el vehículo ha quedado inmovilizado en la calzada o que su carga se encuentra caída. El dispositivo deberá emitir destellos de luz de color amarillo y tendrá que colocarse en la parte más alta del vehículo para garantizar su máxima visibilidad. Otra de las características obligatorias de este dispositivo es que debe estar diseñado para permanecer estable sobre una superficie plana.

Una vez activada, la baliza tendrá que tener un funcionamiento autónomo, a través de una pila o de una batería, que garanticen su uso al cabo de 18 meses. Se considera que cumplen con ese requisito los aparatos que pueden ser recargados con la energía del propio vehículo. Actualmente hay varios modelos de baliza en el mercado que pueden usarse desde hoy, pero a partir del 1 de enero del 2026 solo podrán ser utilizadas las que cuenten con un sistema interno de geolocalización que indique su posicionamiento de forma automática.

Desde ese día ya no podrán usarse los triángulos de emergencia y las balizas luminosas serán las únicas señales de peligro permitidas para advertir de vehículos inmovilizados. A partir del 2026, además de emitir destellos de luz suficientemente visibles, esos dispositivos tendrán que comunicar de forma automática su activación o desactivación y su posición al punto de acceso nacional (PAN), un centro de gestión en el que se volcarán todas las incidencias en las carreteras españolas. Cuando ese sistema de gestión del tráfico y de la movilidad esté a pleno funcionamiento, la información recabada en tiempo real será transmitida a los navegadores de los vehículos o a los teléfonos móviles para advertir a los conductores de los riesgos con la suficiente antelación. La posición del vehículo inmovilizado se enviará cada 100 segundos hasta su desactivación. El coste de las comunicaciones estará ya incluido en el precio de venta de las balizas, cuyo funcionamiento deberá garantizarse durante al menos 12 años.

A partir de ahora, la Dirección General de Tráfico dispondrá de un año para aprobar el protocolo y el formato de envío de los datos de la señal V-16 y de los servicios de auxilio en carretera para su publicación en el punto de acceso nacional de tráfico y movilidad.

Las grúas, también geolocalizadas

Respecto a las grúas de auxilio, el decreto establece su forma de trabajo en busca de una mayor seguridad de los operarios que acuden en ayuda de los conductores. Sus servicios, denominados operaciones de auxilio, tendrán que estar localizados telemáticamente desde que se inician hasta que terminan para que Tráfico y todos los vehículos conozcan su ubicación en tiempo real mientras dura la operación.

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