La Xunta señala a Endesa por la turbidez del río Eume y la sanciona con 950.000 euros

a. f. c. PONTEDEUME / LA VOZ

GALICIA

CESAR TOIMIL

La empresa recurrirá y presentará informes que avalan su proceder y que el problema se debió a causas naturales

14 sep 2021 . Actualizado a las 18:51 h.

La Xunta de Galicia ha declarado a Endesa Generación S. A. responsable de la comisión de dos infracciones muy graves, en relación con el episodio de turbidez del agua del río Eume registrado el año pasado, por las que le impone sendas multas de 600.000 y 350.000 euros. La primera se debe «á desatención ao requirimento notificado o 8 de agosto de 2020 por Augas de Galicia, para que a entidade explotadora do encoro cumprira [...], garantindo o mantemento do caudal ecolóxico». Augas de Galicia asegura que Endesa «continuou co proceso de descenso da cota ata o 28, cando apareceu a turbidez» y la sanciona con 600.000 euros.

La otra penalización responde a que la compañía «modificou o réxime de explotación do encoro sen autorización administrativa, incumprindo as súas obrigas como titular da presa, con graves consecuencias». La sanción es de 350.000 euros porque se consideran como atenuantes el hecho de que la empresa esté tramitando el permiso, «e que os controis levados a cabo no seu plan de vixilancia ambiental do proceso de descenso serviron para detectar a turbidez e interromper o descenso programado, evitando unha afección aínda maior».

Augas reclama a Endesa el pago de 932.284 euros para reparar «os danos e prexuízos ocasionados ao dominio público hidráulico». Esta cifra corresponde al coste «das actuacións que tivo que realizar a Administración para garantir o servizo de abastecemento de auga [de Pontedeume] e realizar o correcto seguimento ambiental». Deja 15 días hábiles para presentar alegaciones.

Fuentes de Endesa confirman que recurrirá la resolución, una vez que la reciba formalmente. Defienden su gestión —«procedió correctamente y dio aviso sobre la explotación del embalse y el régimen concesional»— y atribuyen lo sucedido en el río Eume a un episodio de lluvias torrenciales «concentrado en un corto período de tiempo», el 12 de agosto. «El descenso del embalse se interrumpió el día 14, para frenar el efecto de succión de la masa de agua turbia», añaden.

La compañía esgrime informes periciales que avalan «su correcto proceder», concluyendo que las causas del aumento de la turbidez fueron de carácter natural.