La Policía Nacional trata de resolver los desajustes de la centralización del 091
GALICIA
A Coruña gestiona ahora las llamadas desde las provincias de Lugo y Ourense
01 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.La llamada al 091 hecha desde Santiago para alertar de un atraco y que se desvió a una comisaría de Madrid hizo saltar las alarmas al relacionar esa incidencia con la reciente reordenación de los servicios del 901 en Galicia. Sin embargo, el desvío fue causado por un fallo informático de la compañía telefónica totalmente ajeno a los cambios en la operatividad del servicio, entre otras cosas porque las emergencias policiales de Santiago se coordinan desde A Coruña desde hace ya unos cinco años.
Sin embargo, esa reordenación de los servicios del 091 sí ha provocado algunos problemas derivados de la adaptación a los nuevos sistemas informáticos de última generación con los que cuenta la sala que integra esos servicios. Desde el mes de marzo, A Coruña centraliza todas las llamadas al 091 que se hacen desde las provincias de Lugo y Ourense. Ya estaban integradas las emergencias policiales de Santiago, Ribeira y Ferrol. Esta gran sala es el Centro Inteligente de Mando, Comunicación y Control (Cimacc 091). «Es el corazón de la comunicación con el ciudadano», dice Miguel Ángel Ferrero, comisario de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional de A Coruña.
Monitorización de la actividad
El comisario explica que estas salas integradas están equipadas con alta tecnología que permite la monitorización de toda la actividad policial que se gestiona desde este centro de coordinación, que atiende las emergencias de las provincias de A Coruña, Lugo y Ourense. Pontevedra y Vigo tienen sus propias salas del 091 para atender las incidencias en sus territorios.
El objetivo de los Cimacc es que cualquier llamada tenga una respuesta inmediata, en cualquier tipo de servicio, tanto humanitario como de prevención de un delito. «Estimamos que la capacidad de respuesta que tenemos ante una llamada al 091 dentro de la zona urbana es de unos 3 minutos», asegura Ferrero. Es el tiempo aproximado en el que debe presentarse una dotación policial, uniformada o de paisano, ante una llamada de emergencia.
Los responsables de la Policía Nacional han apostado por la creación de unidades integradas de atención al 091 en toda España, con centros inteligentes desde lo que se coordina la seguridad ciudadana. «Tenemos unos equipos inimaginables hasta hace poco tiempo, desde la conexión y la localización de los vehículos a la monitorización de la actividad policial y la localización a través de mapas digitales del lugar en el que está cada dotación policial», relata el comisario.
Quejas desde Ourense
Esta nueva configuración del 091 ha permitido que en Ourense y en Lugo se hayan destinado más agentes a otros servicios ciudadanos. Y la centralización no parece haber supuesto mayores problemas, salvo los de la adaptación a la nueva situación. En Ourense se han recibido quejas por los problemas que se producen a veces con la dificultad para la ubicación de direcciones desde un operador que está en A Coruña. Y el sindicato SUP denunció que hay llamadas al 091 que se pierden. El comisario Ferrero reconoce que desde que se centralizó el servicio hay desajustes lógicos en un sistema que empieza a funcionar, con muchas particularidades en cada provincia. Explica que hay una mecánica de trabajo que hay que unificar, pero cree que ya se está llegando a un funcionamiento casi óptimo.
El comisario asegura que cada vez hay menos llamadas que se pierden y afirma que, en esos casos, la mayoría son recuperadas por el operador. De todas formas, advierte que puede haber situaciones puntuales en las que coincidan varias llamadas y los operadores no puedan atenderlas en el momento. Recuerda que hay días en las que el Cimacc 091 de A Coruña recibe hasta 700 llamadas. «El ciudadano puede estar tranquilo, desde aquí tratamos de dar respuesta inmediata a todo el mundo», dice Ferrero.