El propio Villarino dijo que nunca en su vida se imaginó el tener que acudir a Santiago para reclamar que se respete la democracia en Ourense. Relató que, con el fin de acabar con el desgobierno en la ciudad de As Burgas y facilitar una moción de censura contra Jácome, aceptó hacerse a un lado y no encabezar la alternativa. «Pero o PP dice que non vale con que me aparte, senón que quer que renuncie á vida política e deixe de ser deputado provincial», añade, una pretensión que considera de otra época. «Isto en democracia non pode sosterse, o PP ten que pedir desculpas», resolvió.
Entretanto, en las escasas réplicas que tuvieron los socialistas en el pleno está la del diputado del PP Alberto Pazos, quien en un cara a cara con Pablo Arangüena, al que se refirió como «Arangüena Smith», recordó que fue el PSOE, tras las municipales del 2019, quien pidió que se apartara a Baltar de la Diputación de Ourense para asegurar la gobernabilidad.