Alfonso Rueda: «El objetivo es consolidar aperturas en la hostelería y no dar pasos atrás»

Juan María Capeáns Garrido
Juan capeáns SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Xoan Soler

El vicepresidente de la Xunta y responsable de Turismo echa en falta las ayudas municipales y estatales

20 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Acostumbrado a lidiar con los asuntos administrativos más áridos, Alfonso Rueda Valenzuela (Pontevedra, 1968) recibió en septiembre un premio envenenado tras doce años en el Gobierno gallego, ocho de ellos como vicepresidente: hacerse cargo de la vistosa cartera de Turismo en el peor momento imaginable. Ningún sector está sufriendo tanto como el de los viajes y la hostelería la dureza de la pandemia, y ya toca alguna alegría.

-¿Los hosteleros que abran la próxima semana pueden tener la esperanza de no que tendrán que volver a cerrar las puertas?

-Para eso trabajamos y por tal motivo vamos a pedir algunas medidas adicionales que no tuvimos hasta ahora. El objetivo es consolidar aperturas en la hostelería y no dar pasos atrás, que a estas alturas complicaría todo.

-El sector se siente señalado y sostiene que no hay datos sólidos para atribuirle los contagios.

-Nunca hemos querido estigmatizar a la hostelería, pero hay un dato objetivo que hemos constatado más de una vez: cuando se cierra la hostelería, los contagios bajan, y cuando hay aperturas, suben. Por eso ahora queremos tomar esas medidas de refuerzo y ser consecuentes dando ayudas directas y rápidas.

-¿Qué eficacia espera de medidas como registrarse con un código QR en los locales?

-Esto tiene varias vertientes sanitarias, pero la más importante es que si varias personas han estado en un local y aparecen contagiadas, ahí se puede identificar un brote y rastrear al resto de clientes que estuvieron en el local.

«Todo se ha decidido con datos objetivos»

-¿Qué referencia seguirán para decidir abrir o no la hostelería en unos territorios u otros?

-Los que saben, los miembros del comité clínico, han sido hasta ahora muy previsibles. Lo que me da más tranquilidad es que todo se ha decidido con datos objetivos, y cuando no se puede, no se puede.

-Tras casi un año de pandemia solo han cobrado una línea de ayudas de la Xunta , ¿por qué no se acompasaron a los cierres?

-Llevo doce años en el Gobierno de la Xunta y nunca vi una orden de ayudas que se tramitara con tanta rapidez, y ya vamos por el segundo plan de rescate, que empezarán a cobrar en marzo. Más rápido no se puede ser, y eso es algo reconocido por los que llevan aquí tiempo trabajando. Y por los propios hosteleros.

-¿Por qué no funcionó la ventanilla única con los ayuntamientos y diputaciones?

-En esas reuniones con los hosteleros, que eran a puerta cerrada, hubo momentos muy tensos donde nos pedían que nos pusiésemos de acuerdo cuanto antes, pero no fue posible porque había intereses pensando en quién firmaba la ayuda, y por eso fracasaron. Pasamos de ofrecer una sola ventanilla a tener 313, eso lo entiende poca gente. Admito que estas discusiones entre políticos no se comprenden, pero esto era una cuestión de eficacia.

-En rigor, ¿quién debe pagar la ayuda a un negocio cerrado?

-Eso tiene una respuesta fácil, todas las administraciones. Se trata de priorizar lo importante, que es ayudar a la gente que por culpa de la pandemia no puede trabajar. Es un debate competencial absurdo. Nosotros decidimos cerrar la hostelería porque el Estado se abstuvo, como si no fuera con ellos. Están ayudando alcaldes de todos los colores, pero alguno nos ha dicho que no tiene por qué dar ayudas porque él no cierra nada, como si fuera un capricho nuestro o hubiera una norma que dijera que en el caso de una pandemia la responsabilidad es de la Xunta. Con la hostelería solo cabían dos opciones, ayudar o poner excusas, como hizo alguno. Pero hay más ausencias clamorosas, como la del Estado, que no deja de marear la perdiz con las ayudas directas.

«Es importante que empiecen a llegar las multas»

Tras casi un año de pandemia, llegan a cuentagotas las ayudas y también las multas que las fuerzas de seguridad han ido imponiendo sin que los incumplidores hayan tenido noticias de ellas. Hasta ahora.

-Hay gente que piensa que esas multas no van a llegar nunca.

-No tenía sentido esa sensación, que era real, de que se podían incumplir las normas sanitarias y que no pasaba nada. Por eso nos ofrecimos a los ayuntamientos a gestionarlas. Lo aceptaron 176, y tenemos ya cinco mil denuncias que están empezando a llegar a esas personas que cometieron una infracción y que pensaban que no les llegaría nunca. Ese dinero irá para los ayuntamientos, salvo los costes de tramitación, porque aquí no se trata de recaudar. Es importante que empiecen a llegar y que se sepa, porque cuando conoces a alguien que ha pagado 300 euros, te lo piensas dos veces.

-¿En Galicia no ha habido muchas extravagancias o es que no nos las han contado?

-Afortunadamente no las ha habido. Siempre hay algún caso puntual, pero no hubo disparates comparados con otros puntos de España. Hay comportamientos repetitivos de gente que no asume las normas básicas sobre la distancia, las mascarillas, las reuniones... de esas hay bastantes.

«El ocio nocturno necesita un plan específico»

-¿Contribuyó el cierre del ocio nocturno?

-Es el sector más damnificado, sin duda. Tardaron más en abrir y fueron los primeros en cerrar en agosto, y tengo que decir que la perspectiva sanitaria es más pesimista para estos hosteleros. Por eso estamos teniendo reuniones con ellos, porque hubo una primera ayuda a los alquileres y para hacer conciertos en un futuro, pero necesitan un plan de ayuda específico y espero que lleguemos pronto a un acuerdo. Reconozco que necesitan una segunda ayuda más fuerte.

-La situación de las agencias de viajes también es muy delicada.

-Es un caso distinto, porque no cerraron por medidas sanitarias, sino por la movilidad. También vamos a aportar ayudas directas (3,6 millones de euros), aunque lo que de verdad necesitan es que todo vuelva a funcionar. En su caso tienen la ventaja de que la oportunidad turística será doble, por el Xacobeo y por el atractivo de los espacios abiertos y de naturaleza de Galicia. Saldrán adelante.

«La Semana Santa no está entre los objetivos turísticos de la Xunta»

Rueda admite que, al menos en su departamento, buena parte de los fondos destinados a la pandemia se han desviado de proyectos vinculados al Xacobeo que, de momento, carecen de sentido.

-¿Cuándo comenzará de verdad el Xacobeo 2021-2022?

-Todo dependerá de la movilidad y de la capacidad que tengamos para organizar eventos con público. Estamos preparados y tomaremos decisiones cuando tengamos una perspectiva a tres meses vista. Pensemos que desde los meses centrales del 2021 habrá un año y medio de Xacobeo por delante.

-¿Es partidario de tratar de atraer turismo en Semana Santa?

-Si le pregunta a cualquier hostelero o profesional del turismo y le da a elegir entre poner el foco en la Semana Santa o ir con prudencia para tener un verano más estable, el 99,9 % prefiere lo segundo. Si no damos pasos atrás, la situación en Semana Santa será mejor, pero no vamos a obsesionarnos con un período tan corto con todo lo que tenemos por delante. La Semana Santa no está entre los objetivos turísticos de la Xunta.

-¿Qué le parece que a Madrid estén llegando turistas en busca de medidas más relajadas?

-El destino turístico que vaya por ahí se equivoca. Esa situación la ha propiciado el Gobierno al no querer imponer unas normas comunes que nos hagan reconocibles en el resto del mundo, y la consecuencia es que desde Europa no se nos percibe como un país con unas normas seguras. Galicia no va a ser así, eso es ir con las luces cortas. Yo lamentaría que alguien venga a España o a Galicia pensando que las garantías sanitarias no nos las tomamos en serio.

-¿Quién recuperará antes el pulso turístico, Galicia o España?

-A todos nos interesa que España sea una potencia, y sin saber cuándo volverán los cinco millones de turistas del 2019, sí creo, porque lo que dicen los profesionales, que el modelo de Galicia y el de la España verde tendrá una recuperación más rápida.

-Cuando las aerolíneas regresen habrá mercadeo por las rutas, ¿se plantean financiar alguna para atraer turistas?

-No, es un modelo que abandonamos en el 2012 para apostar por la coordinación aeroportuaria, porque un incentivo dura lo que dura. Yo creo que en las actuales circunstancias no hay que obsesionarse con el turismo internacional y pensar más en el de proximidad, el de España, Portugal y los países europeos más cercanos. El AVE, si por fin llega, sí será un punto a favor.