Las cuentas de la Xunta se abren paso a la espera concretar los 115 millones del fondo de consenso

GALICIA

Sandra Alonso

El PP rechaza las enmiendas de devolución de BNG y PSdeG y se resigna a impulsar los presupuestos en solitario

21 dic 2020 . Actualizado a las 18:49 h.

El proyecto de Lei de Orzamentos da Xunta para el 2021, que eleva hasta los 11.563 millones de euros la capacidad de gasto de la Administración autonómica, un 13,9 % más que este año, superó este lunes el debate de totalidad en el Parlamento y prosigue así con el calendario de tramitación, que deberá concluir en febrero con la aprobación definitiva. La holgada mayoría que ostenta el PP no dejó lugar para muchas sorpresas al desactivar las enmiendas de devolución presentadas por el BNG y el PSdeG, que ven el proyecto como una «oportunidade perdida» para hacer frente a la crisis provocada por la pandemia de coronavirus.

El debate sirvió para confrontar dos visiones, casi antagónicas, sobre la política presupuestaria. De un lado la del Gobierno del PP, que defiende su modelo de beneficios fiscales que permite a los gallegos ahorrar 472 millones en impuestos. Del otro, la de nacionalistas y socialistas, que propugnan un incremento de la recaudación con la creación de nueve figuras fiscales nuevas, que van desde el impuesto sobre grandes superficies comerciales al de emisiones nocivas, pasando por el de bebidas azucaradas, viviendas vacías, redes de alta tensión o agua embalsada, con el fin de recaudar hasta 270 millones de euros a mayores.

El conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, marcó distancia con el «sablazo fiscal» que en su opinión propugna la izquierda con un presupuesto ya de por sí expansivo. «É chamativo que queiran subir impostos cando o orzamento medra case que un 14 %», señaló el conselleiro, y el gasto en inversión se incrementa en un 54%.

Con estas diferencias de fondo, solo queda un pequeño resquicio para sostener un acuerdo político: el llamado fondo de consenso, esa reserva de 115 millones de euros que se hace la Xunta para financiar los acuerdos y medidas concretas que puedan concretar Gobierno y oposición en el seno de la comisión de reactivación económica, social y cultura creada en el Parlamento. Precisamente en relación a este fondo, Valeriano Martínez destacó que la intención de la Xunta es «concretar» los proyectos financiables con este fondo en el primer trimestre del 2021.

La existencia misma de este fondo de consenso no parece que vaya a mudar la postura de la oposición. La portavoz nacional del Bloque, Ana Pontón, censuró el proyecto en su conjunto al afirmar que supone «un portazo» a la reactivación del país. «O único histórico destes orzamentos é que contan a mesma historia de sempre», dijo, pues entiende que se trata de un proyecto elaborado desde la «rutina» y con grandes dosis de «propaganda». «A única normalidade é a do rodillo», insistió Pontón, con la que tramita el PP las cuentas.

Similares reproches también por boca del secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, quien cree que la Xunta carece de ideas y de proyectos para gastar los 1.100 millones extra que la Xunta recibirá de la Administración del Estado. Caballero defendió el incremento de la presión fiscal, pues cree que en el actual contexto «as persoas millonarias poden aportar un plus», si bien el responsable de Facenda reprochó que el PSdeG considere como ricos a efectos de IRPF los ingresos por encima de los 50.000 euros, para subirle los impuestos, propuesta que en el caso del BNG se plantea para las rentas superiores a los 120.000 euros.