La Audiencia Nacional impide que el abogado Gonzalo Boyé se desvincule de la trama de Sito Miñanco

La Voz VILAGARCÍA

GALICIA

El abogado Gonzalo Boye
El abogado Gonzalo Boye David Zorrakino | EUROPA PRESS

Frente a la pretensión del defensor, la jueza concluye que «existe una lógica interrelación» entre el eventual delito de blanqueo y el de narcotráfico, por lo que «es necesario el enjuiciamiento conjunto».

11 dic 2020 . Actualizado a las 20:43 h.

En febrero del 2018, una investigación de dos años conducía a la detención del cambadés José Ramón Prado Bugallo, el legendario Sito Miñanco, y a la desarticulación de la organización de narcotráfico que comandaba, considerada como la más importante y capaz de Europa. Una de las ramas derivadas de aquella operación, bautizada como Mito, situó al abogado Gonzalo Boyé en el punto de mira. La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional y el Juzgado Central número 3 de la Audiencia Nacional acusan al letrado de intentar blanquear 889.620 euros para Miñanco, al que entonces representaba.

El mes pasado, Boyé maniobró para que esta causa se desprendiese de la investigación principal que se sigue contra el capo arousano, de forma que pasase a manos de un juzgado de instrucción. La magistrada María Tardón acaba de liquidar sus pretensiones, en un auto en el que deniega su solicitud de inhibición.

La jueza considera que existen indicios suficientes que conectan el tráfico de cocaína del que acusa a Miñanco con el blanqueo de capitales que atribuye a Boyé, entre cuyos clientes de elevado perfil mediático se encuentra Carles Puigdemont, por citar un ejemplo.ç

Por lo que respecta al cambadés, el auto que firma la titular del Juzgado Central número 3 recuerda que Prado Bugallo cae a raíz de dos operaciones —3,3 toneladas de cocaína interceptadas a bordo del buque Thoran, en octubre del 2017, y 615 kilos de polvo blanco intervenidos, un mes después, en el interior de un contenedor en los Países Bajos—, además de diferentes transportes de dinero en efectivo, en los que «participaron destacados miembros del entramado criminal». En uno de ellos, cinco ciudadanos colombianos fueron sorprendidos en el aeropuerto de Barajas cuando trataban de volar a su país con 889.620 euros encima.

Aquí es donde la magistrada entiende que interviene Boyé, a quien atribuye, junto a otros investigados, varias maniobras para recuperar aquella suma. Entre otras, la simulación de contratos de compraventa que acreditasen el origen del dinero y fueron presentados ante la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales. Todo ello, según el auto, como resultado «de las instrucciones impartidas por Prado Bugallo». En definitiva, concluye la jueza, «existe una lógica interrelación, incluso temporal» entre el eventual delito de blanqueo y el de narcotráfico que lo precede, de forma que «es necesario el enjuiciamiento conjunto».