Marisa López, directora de la Axencia Galega de Doazón: «Si hay un buen motivo para salir de casa, ese es sin duda donar»

El impacto del coronavirus y de las restricciones que ha impuesto a la vida normal de los ciudadanos repercute también en actividades tan esenciales como la donación de sangre, que se ha ido reorganizando para mantener cubiertas las necesidades sanitarias, tal y como explica la directora de la Axencia Galega de Doazón de Órganos e Sangue (ADOS), Marisa López García.

-Cómo ha afectado la pandemia al trabajo de la agencia en donación de sangre?

-Nuestro centro está declarado como esencial y nuestra actividad no puede en ningún momento paralizarse, y así lo hemos hecho, a pesar de las circunstancias tan complejas, implementando desde el primer momento protocolos de seguridad para garantizar la donación segura y la seguridad de los profesionales, y transmitiendo la idea de que si hay un buen motivo para salir de casa, este es sin duda donar. Durante el primer estado de alarma atendimos a más de 1.400 donantes. En una situación de incertidumbre, de miedo a salir a la calle, la respuesta fue encomiable. La demanda de componentes sanguíneos por parte de los centros sanitarios estuvo alrededor del 75-80 % de un año normal, y durante todo ese tiempo fuimos capaces de dar servicio a todas las peticiones de centros, tanto públicos como privados, de hematíes, de plaquetas y de plasma. Eso supone dar atención a los pacientes que lo precisan, en su mayoría pacientes crónicos y oncológicos. También atender a las urgencias que surgieron y a los trasplantes que se priorizaron. Las personas que donaron durante todo ese tiempo permitieron una cobertura del servicio del 100 %. Hay que agradecerles su valentía, su responsabilidad.

-¿Se ha recuperado ya el nivel de demandas y donaciones?

-En peticiones estamos muy ligeramente por debajo, yo creo que la actividad quirúrgica ahora mismo está siendo similar a la del año anterior. En cuanto a las donaciones, en algún momento ha habido algún pequeño descenso, pero en todo momento nos han permitido atender el 100 % de las demandas. Evidentemente tenemos una campaña universitaria que está afectada por la deslocalización de los estudiantes, que no tienen clases presenciales siempre. Pero hemos estado trabajando directamente con los rectorados y decanatos, adaptando nuestra actividad a sus requerimientos. También hay alguna dificultad con las colectas en entornos laborales. Tenemos algún problema puntual en empresas que están en situación más compleja, y nos cuesta más retomar esta actividad que sin duda es indispensable para lograr esas entre 450 y 500 donaciones diarias que necesitamos.

-¿Y se están consiguiendo?

-Estas semanas estamos teniendo unas buenas entradas y lo estamos logrando, pero el esfuerzo que tenemos que hacer es importante para que no se baje la guardia, para tener siempre unas reservas que debemos garantizar. El trabajo tanto en los locales de donación como en las unidades móviles sigue pautas muy estrictas, con toma de temperatura al acceder, uso de mascarilla, protocolos de seguridad en cuanto a limpieza y desinfección, acceso y número de personas en el interior, etc... y yo creo que con esto y siendo muy activos en redes sociales recordando la necesidad de donar y las ubicaciones de nuestros buses y enviando mensajes personalizados a los participantes estamos consiguiendo que el flujo de donantes se mantenga. Las reservas de A positivo y 0 positivo suelen ser las que más sufren, pero vamos dando avisos cuando algún grupo está en niveles más bajos.

-¿El nuevo estado de alarma y el toque de queda les afectan?

-El centro funciona ininterrumpidamente 24 horas y en las colectas tenemos un rango muy amplio que a veces entra en ese toque de queda, pero como centro esencial estamos excepcionados. Hay colectas que se desarrollan hasta las 22.00, y tenemos una colecta de noche también en el turno nocturno de Citroën y vamos a seguir prestando ese servicio, no cabe duda. Y agradecemos mucho a todas las personas que, a pesar de las restricciones de movilidad y actividad, siguen colaborando para que podamos mantener nuestra actividad.

-¿Se puede ir a donar sin cita previa?

-Hemos hecho un esfuerzo muy importante por implementar esa cita previa a través de un teléfono gratuito, el 900 100 828, para de esta forma poder modular el acceso tanto a las unidades móviles como a los locales de donación, para que haya una fluidez en el acceso. Esto fue estricto en la primera parte de la pandemia. Actualmente, además de las personas que acceden con cita previa, siempre que es posible estamos atendiendo también a los donantes que se presentan de forma espontánea, cuando hay alguna cita que no se cubre o cuando alguna persona ve la unidad móvil y recuerda esa posibilidad de donar. Siempre es bueno acercarse y preguntar, si hay un hueco vamos a atender siempre, y en el caso de que haya gente en ese momento, lo que siempre recomendamos es facilitar su teléfono y nosotros lo contactamos en cuanto volvemos a esa localidad.

-En medio de la pandemia también pusieron en marcha un programa de recogida de plasma hiperinmune...

-En un escenario en el que ningún tratamiento ha demostrado su eficacia frente al coronavirus, el plasma hiperinmune puede ser una terapia útil, y por tanto hemos puesto en marcha ese programa de recolección de plasma de pacientes que han superado el covid-19, para poder proporcionar un componente nuevo con todas las normas de seguridad. Nos marcamos un stock entre 250 y 300 unidades para la primera parte del proyecto, y se completó ese objetivo

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