El BNG recoge las demandas del sector de la hostelería y pide un plan de rescate de 30 millones

GALICIA

Lavandeira jr

Pontón advierte que ya se perdieron 10.000 empleos en una de las actividades más afectadas por la pandemia

12 nov 2020 . Actualizado a las 14:40 h.

La pandemia de coronavirus ha puesto en una situación muy complicada al sector de la hostelería en Galicia, que permanece sin actividad en las grandes áreas urbanas y está arrastrando en cadena a sus proveedores (carnicerías, panaderías, bodegas o pescaderías), que han visto como sus ingresos mermaron de manera considerable cuando no se quedaron a cero. La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, mantuvo este jueves un encuentro en el Parlamento con representantes del sector para escuchar sus demandas y proponer después a la Xunta un plan de rescate para el sector que contenga «un mínimo» de 30 millones de euros en ayudas directas.

Pontón puso de relieve que muchos representantes del sector «non foron capaces de sobrevivir» a la primera ola de la crisis del covid-19, del pasado marzo, y ya no se trata de que no puedan pagar las facturas de sus negocios: «Non poden pagar as da súa casa», recalcó. Cifró en 10.000 los puestos de trabajo destruidos en el sector de la hostelería y el turismo durante la pandemia y criticó que la Xunta se limitara a anunciar ayudas «que como moito chegarán en decembro», pero que, a su entender, son claramente insuficientes.

Y es que la dirigente nacionalista miró con el rabillo del ojo al País Vasco, cuyo Gobierno impulsó un plan de auxilio al sector valorado en 45 millones, frente a los 15 millones en ayudas que prevé la Xunta. Señaló que, como poco, esa cifra habría que duplicarla, hasta los 30 millones, para conformar un plan gallego de rescate.

En el encuentro con la la líder del BNG participaron desde el presidente del Clúster de Turismo de Galicia, Cesáreo Pardal, hasta varios representantes del sector. César Ballesteros, de la Asociación Provincial de Hostelería de Pontevedra, tomó la palabra en nombre de ellos para poner de manifiesto que las ayudas anunciadas por la Xunta solo sirven «para paliar muy mínimamente» las necesidades que tiene el sector, que pese a tener cerrados los establecimientos siguen acarreando con costes como el pago de las cotizaciones sociales, los locales, luz y agua u otros impuestos. «El sector necesita un plan de rescate integral», insistió Ballesteros.

Ana Pontón, por su parte, planteó un aplazamiento en el pago de impuesto, una quita en el pago de cuotas a la Seguridad Social para los más afectados, al tiempo que llamó a la Administración gallega a negociar con las entidades bancarias el aplazamiento en el pago de créditos o en la adoptación de medidas dirigidas a rebajar el coste de los alquileres.