O Porriño y Arteixo, únicos concellos que se mantienen con más nacimientos que muertes cada año desde 1975

Mónica Pérez Vilar
MÓNICA P. VILAR REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Bebé nacido en Vigo en el año 2019
Bebé nacido en Vigo en el año 2019 M. Moralejo

Las ciudades gallegas tienen los peores saldos, y en A Coruña y Vigo los fallecimientos superan en más de 800 a los nacimientos

01 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Son auténticos perros verdes en una Galicia que celebra desde hace años más entierros que bautizos. Según los datos provisionales de movimiento natural de la población en el año 2019 hechos públicos ayer por el Instituto Galego de Estatística (IGE), únicamente cinco concellos registraron el año pasado más nacimientos que muertes. Ames (con 72 nacidos más que fallecidos), O Porriño (con 39), Salceda de Caselas (con 29), Arteixo (con 7) y Ribadumia (con 2) son los únicos municipios que se resisten a seguir la tendencia del saldo vegetativo negativo que Galicia registra desde hace más de 30 años.

De ese listado de excepciones, que en el 2017 sumaba trece concellos y en el 2018 ya había bajado a siete, se cae Barbadás, al registrar 16 muertes más que nacimientos tras haber encadenado tres años positivos. Más llamativos son los casos de Oroso y Poio, que desde hace décadas se encontraban entre las consideradas como reservas demográficas de Galicia, pero que el año pasado cayeron a cifras negativas. En concreto, Oroso tuvo 5 fallecimientos más. Este municipio coruñés no tenía saldo vegetativo negativo desde 1994.

Más destacado todavía es el caso de Poio. Esta es la primera vez que la serie del IGE, que se remonta a 1975, le otorga una cifra negativa, y hubo 34 muertes más que nacimientos.

Lo que este concello pontevedrés no logra, mantener un intachable historial positivo, lo consiguen, sin embargo, Arteixo y O Porriño. Situados ambos en la corona metropolitana de dos urbes potentes (A Coruña y Vigo, respectivamente) y con importantes polígonos industriales, no conocen, por el momento, lo que es registrar un saldo vegetativo de signo negativo. Con todo, las cifras de ambos en el 2019 fueron peores que las del año anterior.

Ames también lleva décadas encadenando cifras positivas, en concreto desde el año 1992, mientras que Salceda registra más nacimientos que fallecimientos desde el año 2003. En el caso de Ribadumia, los dos alumbramientos más suponen alterar su tendencia negativa de los últimos nueve años.

15.651 nacimientos en Galicia

Durante el 2019 nacieron en Galicia 15.651 niños (un 5,5 % menos que el año anterior). Ocho de cada diez de esos alumbramientos correspondieron a madres residentes en las provincias atlánticas. El 78 % de las madres tenían 30 años o más, y el 13,4 % ya había alcanzado los 40.

Las defunciones prácticamente doblaron la cifra de nacimientos, alcanzando las 31.203. Más de la mitad de los difuntos ya habían cumplido los 85 años.

La combinación de ambas cifras deja a la comunidad con un saldo negativo de 15.552 personas. La inmensa mayoría de los municipios contribuyen a esa situación. Las cifras negativas son especialmente abultadas en las siete ciudades. En A Coruña se registraron 879 muertes más y en Vigo, 826. En Ourense, el saldo negativo fue de 580 personas; en Ferrol, de 499; en Lugo, de 368; en Pontevedra, de 251; y en Santiago, de 215.

-15.552

Más muertos que nacidos

El saldo vegetativo en Galicia volvió a ser negativo, y ya van 31 años consecutivos.

5

Concellos con saldo positivo

En Ames, O Porriño, Salceda de Caselas, Arteixo y Ribadumia nació más gente que murió

8 de cada 10

Nacen en provincias atlánticas

El 79,8 % de los 15.651 niños nacieron de madres residentes en Pontevedra o A Coruña