En kayak, con chaleco salvavidas, silbato, espejo de señales y bengalas

La Voz REDACCIÓN

GALICIA

Imagen del dispositivo de búsqueda de los dos jóvenes desaparecidos en Porto do Son
Imagen del dispositivo de búsqueda de los dos jóvenes desaparecidos en Porto do Son CARMELA QUEIJEIRO

Fomento pide a los usuarios de estas embarcaciones que cumplan las medidas de seguridad para evitar accidentes como el de Porto do Son

24 jul 2020 . Actualizado a las 23:45 h.

Ante la sucesión de percances de las últimas semanas con los kayaks como protagonistas, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, a través de la Dirección General de la Marina Mercante, ha hecho un llamamiento a los usuarios de estas embarcaciones y de canoas para que sigan «las medidas de prevención y seguridad establecidas».

El Gobierno ha emitido un comunicado para recordar las precauciones que se deben tomar en embarcaciones menores y para apelar al «sentido común» de los usuarios». «El uso cada vez más extendido de estas embarcaciones, que no requieren titulación previa, está provocando numerosas incidencias que, en algunas ocasiones, desembocan en tragedia», lamentan desde la Dirección General. Es el caso de los tres jóvenes que salieron al mar en Porto do Son el 6 de julio y de los cuales dos siguen desaparecidos, mientras que otra chica pudo ser rescatada. O de un hombre que murió hace unos días en Carnota, aunque en este caso se cree que pudo haber sufrido una indisposición.

Entre las medidas de prevención más importantes, Fomento recuerda que antes de salir se debe mirar el boletín meteorológico y las previsiones para las próximas horas y no echarse al mar si hay viento, mal tiempo o escasa visibilidad.

Los kayakistas, indican, deben llevar siempre un chaleco salvavidas especial para kayak de mar, un silbato, espejo de señales, bengalas rojas, una brújula sumergible fosforescente, cinta adhesiva de alta resistencia y un cuchillo. Para prevenir hipotermia, tras un posible vuelco, es recomendable vestir con un traje de neopreno con bandas reflectantes. Otro de los elementos claves es el de disponer de un medio de comunicación para emergencias.

Antes de salir se recomienda a los usuarios que comprueben la estanqueidad de los compartimentos, revisen el cubre-bañera, lleven una bomba de achique manual y una pala desmontable de repuesto. También se aconseja que aprendan y practiquen de antemano el «esquimotaje», la maniobra que permite volver a la posición de equilibrio después de un vuelco. Además, la embarcación tiene que tener un cabo de seguridad en los costados, con asas a proa y a popa, y un cabo de remolque a bordo de 10 metros de longitud, como mínimo.

Pero, sobre todo, la Dirección General de la Marina Mercante pide sentido común a los tripulantes de kayaks y embarcaciones similares para evitar riesgos innecesarios que pueden desembocar en la muerte, en el peor de los casos, o en un gran susto y la movilización de importantes recursos. Navegar en compañía de otros kayaks, con el número de tripulantes autorizados, siempre con luz del día, sin alejarse más de 6 millas de la costa y no abandonar la embarcación en caso de caída, también son consejos a tener en cuenta.