Gonzalo Caballero, líder del PSdeG: «El PP gestionaba otras crisis salvando bancos, y ahora toca salvar personas»

GALICIA

PACO RODRÍGUEZ

El candidato socialista cuestiona la gestión de la Xunta de esta epidemia: Feijoo, denuncia, «estuvo ausente»

01 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Justo cuando Gonzalo Caballero (Ponteareas, 1975) se había lanzado a la conquista de la presidencia de la Xunta, la pandemia del coronavirus le obligó a echar el freno al suspenderse la campaña. El líder del PSdeG fue muy crítico con la nueva cita electoral de julio, pues sostiene que la amenaza del virus no ha desaparecido. De hecho, concede esta entrevista sin quitarse apenas un momento la mascarilla.

—¿Tan mal le viene ahora al PSdeG una campaña electoral?

—La prioridad es luchar contra la crisis sanitaria, económica y social, y creemos que lo mejor no era hacer coincidir la desescalada con la campaña, porque descentra de la atención que tiene que tener la lucha contra el virus. Mi crítica no tiene nada que ver con las expectativas electorales, sino con que Feijoo fijó una fecha que nadie pedía en Galicia.

­—¿Era mejor el 27 de septiembre, como llegó a proponer?

—Planteamos que si se hacía primero la desescalada, podríamos testar mejor la circulación del virus, el riesgo de rebrotes y, si todo evolucionaba bien, en septiembre habría mayor normalidad para abordar las elecciones. El propio Feijoo dijo que convocaría una vez superado el estado de alarma y la emergencia sanitaria, pero incumplió el acuerdo.

—¿Actuó por interés electoral?

—Es evidente que Feijoo no quiere que haya tiempo suficiente para aclarar sus responsabilidades en Galicia, prefiere evitar un debate sosegado sobre lo ocurrido, corre mucho porque el análisis de las cosas puede empeorar sus expectativas electorales.

—Sus detractores le dicen que en marzo no quería suspender la campaña y que ahora no quería reanudarla.

—Sí, hay unos hooligans del PP dedicados a confrontar conmigo en las redes sociales. La derecha es así, están acostumbrados a vivir en la mentira. Fíjese que dos días antes de declarar el estado de alarma, Feijoo estaba en Ferrol ante 500 personas, y ningún partido hacía ya actos electorales.

—Ese mismo día, usted hizo una visita electoral a una conocida planta patatas fritas en Arteixo.

—Mantuvimos aquella visita en la agenda cumpliendo con las normas establecidas, mientras que, insisto, Feijoo hacía actos multitudinarios. El discurso de la anticipación de Feijoo al virus es una gran falacia porque solo decreta la emergencia sanitaria al ver que Pedro Sánchez iba a decretar el estado de alarma.

—El aplazamiento electoral, ¿amplía o reduce las opciones de cambio político en Galicia?

—Creo que los dos grandes bloques no van a tener trasvases significativos. En todas las elecciones del 2019 hubo una mayoría de progreso clarísima en Galicia, y si van a votar el 12 de julio, Feijoo será parte de la historia política de este país. Esta crisis demuestra la importancia de salir de la misma por la izquierda. El PP gestionó otras crisis salvando bancos, y ahora toca salvar personas del riesgo de desigualdad.

—¿Cómo afectará la crisis del covid-19 a esta campaña?

—El mundo ha cambiado y nuestra prioridad es la reconstrucción. El confinamiento impidió que el virus circulara por Galicia al nivel que lo hizo en otras comunidades, pese a lo cual hubo dos grandes focos de contagio, en las residencias y entre los profesionales sanitarios, ambos competencias de la Xunta. Y eso lleva el sello del PP y de Feijoo.

—¿Y no ocurrió lo mismo en Castilla-La Mancha, Madrid o Aragón, incluso con mayor incidencia?

—Es evidente que son problemáticas compartidas, pero el agravante en Galicia es que e virus aquí apenas circuló, llegó con un desfase de quince días respecto a otros territorios, y si tenemos en cuenta que el nivel de contagios fue de menos del 2 %, concluimos que la letalidad en Galicia ha sido muy grave.

—Y mientras, Alcoa despide a la mitad de su plantilla y el sector del automóvil se tambalea. Se está poniendo un panorama terrible.

—Estamos en una crisis de enorme envergadura, vendrán meses de enorme complejidad, y por eso creemos que en Galicia es necesario un gran acuerdo por la reconstrucción económica y social. Le planteé a Feijoo que sentara a la mesa a las fuerzas políticas, a los agentes sociales y la administración local para movilizar 2.500 millones de euros para la reconstrucción. No tuve respuesta.

«Fallos los han tenido todos los Gobiernos del mundo»

Caballero repasa, con diferente perspectiva, la gestión de la crisis sanitaria por parte de la Xunta y el Gobierno central.

—¿En qué ha fallado la gestión de la Xunta de esta crisis?

—En que se ha caracterizado por la inacción. Feijoo estuvo ausente y actuó como mero observador.

—Y el Gobierno central, ¿no ha cometido ningún error?

—Es evidente que en una situación así se toman decisiones que no siempre son las más acertadas. Pero a grandes rasgos España tomó decisiones de mucho calado antes que otros países como Estados Unidos o Inglaterra. y logró el reconocimiento de la OMS.

—¿No cree que al principio se valoró mal la amenaza del virus?

—Fallos los han tenido todos los Gobiernos del mundo a la hora de detectar el riesgo y, evidentemente, tenemos que sacar lecciones.

—Pero solo el Gobierno de España exigió explicaciones a los organizadores del Mobile, que no veía la necesidad de suspenderlo...

—Si, eso lo dice mucho la derecha en las tertulias, pero tampoco el PP hizo ningún planteamiento sobre esa cuestión. En Galicia, poco antes de la declaración del estado de alarma, la situación también era de total imprevisión. Recordamos muy bien las conversaciones que tuvimos con el conselleiro de Sanidade y con el presidente de la Xunta.

«En Galicia, poco antes de la declaración del estado de alarma, la situación también era de total imprevisión»

—¿A que se refiriere con eso?

—Pues a que dos días antes de que Pedro Sánchez anunciara el estado de alarma, Feijoo me llamó para decirme que todo estaba controlado y que no preveía más medidas que las ya tomadas hasta aquel momento. Miércoles, 11 de marzo a las ocho de la tarde.

—Pues al día siguiente anunció el cierre de centros educativos.

—Es que después quiere construir una realidad distinta. La derecha es especialista en crear relatos falsos para tergiversar.

—¿Entonces no tomó esa decisión, fue falso?

­—Lo que digo es que la Xunta anunció una suspensión de las clases voluntaria, que sería efectiva desde el lunes 16 de marzo, pero para entonces ya estaba declarada la alarma y se pararon todos los centros de España.

—¿No ve ninguna anticipación?

—Es que si hubiera anticipación en Galicia, Feijoo sería el responsable de los fallecidos en las residencias de mayores por no tomar las medidas de protección necesarias. Se equivoca intentado ponerse medallas.

«¿Si hablo con Gómez-Reino y Pontón? Hablo mucho con los alcaldes del PSOE, los presidentes de las diputaciones y los ciudadanos»

—«Pitufo gruñón», «mentireiro compulsivo», «un bozal a Tellado»... ¿A que obedece la radicalización de su discurso contra Feijoo y el PP en esta campaña?

—Hemos sido una oposición extremadamente leal con Feijoo, propusimos líneas de mejora en sanidad, en las residencias, en la economía... Pero hizo poco caso, así que creemos que, ahora, con las elecciones fijadas, le debemos ofrecer a los gallegos un proyecto político diferente, que nos permitirá encarar mejor el futuro.

—¿Niega entonces que basculara hacia posiciones más extremas?

—Somos un partido de gobierno, gobernamos en tres de las cuatro diputaciones, en cinco de las siete ciudades gallegas y tenemos más de cien alcaldes. Todos saben quién es el PSdeG, y también quién es el PP, que quiere derrocar al Gobierno de Sánchez con métodos poco dignos, y Feijoo es un peón de esa estrategia.

—¿Qué hará tras el 12 de julio si no logra ser presidente?

—Haré lo que estoy haciendo, seguiré trabajando sin parar para fortalecer la opción del progreso político porque es la que beneficia a los gallegos.

—¿No quiere prejuzgar nada?

—El balance de mi etapa política corresponderá hacerlo tras las elecciones, pero el resultado de todas las convocatorias fue positivo para el PSdeG porque ganamos elecciones y conectamos con una mayoría de progreso que sabe que somos la mejor opción.

—¿Cómo es su relación con Gómez-Reino y Ana Pontón, con los que quizás deberá gobernar?

—Positiva.

—¿Habla con frecuencia con ellos, se coordinan?

—Hablo mucho con los alcaldes del PSOE, los presidentes de las diputaciones y los ciudadanos.