¿Cuántas son las repeticiones excepcionales?

Sara Carreira Piñeiro
Sara Carreira REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

En Galicia, la secundaria y el bachillerato tienen unos 122.000 alumnos
En Galicia, la secundaria y el bachillerato tienen unos 122.000 alumnos CÉSAR DELGADO

En Galicia cada año se quedan unos 18.000 alumnos en el mismo curso que han realizado, solo en primaria, ESO y bachillerato. Y 24.000 pasan con alguna materia pendiente

04 may 2020 . Actualizado a las 17:56 h.

Uno de los profesores más seguidos en las redes, Toni Solano, director del IES Bovalar de Castellón, propuso una miniencuesta en Twitter sobre la repetición. La pregunta era sencilla: ¿Qué porcentaje de repetición por nivel se consideraría excepcional en estos momentos? El 76% de quienes votaron dijeron menos del 10% y el 14%, entre el 10 y 20%. Antes había preguntado el número de asignaturas suspensas en la segunda evaluación para que ese estudiante tuviese que repetir: el 61% dijo más de cuatro y el 18%, más de cinco.

En Galicia, en el curso 2017/18, el último del que hay estos datos, repitieron curso 17.777 estudiantes entre 6.º de primaria y 2.º de bachillerato. Y 24.204 pasaron de curso con alguna suspensa. Estos son los datos que nos pueden servir de referencia cuando salgan las estadísticas de este singular 2019/20, que siguiendo la lógica de la encuesta de Solano no deberían registrar más de 10.300 repeticiones. Hasta ahora, el único curso en el que realmente es excepcional repetir es 6.º de primaria, con un 98% de alumnado que promociona (los porcentajes son similares o superiores en otros cursos de primaria); en el resto de etapas hay al menos un 11% de estudiantes que no pasan de curso con sus compañeros, y eso que hasta ahora la repetición ya tenía que considerarse la última opción.

La ley prohíbe que un alumno repita dos veces el mismo curso

Los cursos más problemáticos son cinco, aunque por razones muy diferentes: por una parte, 2.º y 3.º de ESO, con un 14% de repeticiones; también 4.º de ESO en la vía de Enseñanzas Aplicadas (el invento de Wert para desviar a los malos alumnos a FP), que suma un 30% de fracasos; y bachillerato, con un 15%-20% de alumnos que no promocionan. En segundo y tercero de ESO la brecha académica que muchos alumnos arrastran desde primaria (muchos desde tercero) es indisimulable, y en cada aula hay un grupo más o menos numeroso de estudiantes desconectados, totalmente desmotivados en la peor edad posible, muchos de los cuales ya llevan una repetición en sus espaldas. Por eso, en el curso 2017/18 analizado, fueron 3.336 (atendiendo a las estadísticas del Ministerio de Educación) los que se quedaron un año más en 2.º de ESO y 3.190 los que hicieron lo mismo en tercero; hay que tener en cuenta que a veces son los mismos alumnos, porque la Lomce prohíbe que un alumno repita dos veces el mismo curso.

Casi 5.000 alumnos gallegos se titulan en ESO con alguna asignatura suspensa

En cuarto de ESO la situación es diferente: la Lomce decidió dividir este curso en Matemáticas, con una opción académica (para pasar a bachillerato) y una aplicada (para FP). En teoría, da igual la rama que se escoja porque las opciones al terminar están abiertas (se puede ir indistintamente e FP o bachillerato), pero en la práctica los estudiantes con mejores notas y un entorno social más alto van siempre a Matemáticas Académicas (incluso, en el colmo de la segregación, algunos centros las ofrecen en castellano e inglés, derivando a este último grupo a los alumnos excelentes); esto se traduce, como no puede ser de otra manera, en más repeticiones (tres veces más) en el 4.º de ESO de Aplicadas frente al de Académicas. El único consuelo que queda en Galicia es que la vía de Aplicadas no tiene ningún éxito (un mérito de los centros y las familias) y se matriculan menos de 3.000 alumnos (frente a los 17.000 de la opción de bachillerato). Como curiosidad, para quienes tienen miedo a la flexibilidad de este año al titular con suspensas, decir que de los 19.775 alumnos de 4.º de ESO (en total) en Galicia el año del estudio, 4.832 terminaron la ESO con alguna asignatura pendiente (podían tener hasta dos si no eran Lengua/Lingua o Matemáticas a la vez).

Finalmente, el nivel de repetición está en el 15% (en primero) y 20% (en segundo)  pero es singular: al tratarse de una etapa posobligatoria la casuística que justifica este nivel de repeticiones es mucho más amplia que la habitual, incluso en el régimen ordinario y presencial (hay gente que trabaja, que compagina los otros estudios...).

La única etapa donde la repetición es excepcional de verdad es en primaria

En resumen, el 98% de los estudiantes gallegos terminan la primaria en la edad que les corresponde, el 80% hace lo mismo en ESO (la tasa de repetición es mayor, pero es que muchos alumnos repiten dos veces o abandonan de facto los estudios) y el 60% de los jóvenes de 18 años acaban el bachillerato. Aquí, además de las repeticiones acumuladas están los abandonos escolares tras la ESO y los estudiantes de FP de grado medio.

¿Repetirá un alumno que tenga muchas asignaturas con un 4?

Hasta aquí es el análisis cuantitativo, pero queda el más difícil, el cualitativo. En la última reunión entre la consellería y los directores de centros públicos de Galicia, la cuestión preocupaba, y mucho. Porque los profesores se preguntaban algo muy razonable: ¿Hago repetir a un alumno que tiene cinco materias suspensas pero en todas ha sacado más de un 4 y paso al estudiante que suspende tres con un 2 o menos? La clave, explicaban en esa reunión, es determinar si ese alumno llega a los objetivos en las competencias clave. Por eso, explicaban en la consellería, «para determinar o grao en que se acadan os obxectivos e competencias clave, habería que describilos con anterioridade á avaliación, e ver como contribúe cada materias a que se acaden ou non. Xustificar cando si e cando non. Habería que telos con carácter previo». Por tanto el número de suspensos «pode ser un referente pero non un criterio», aunque «é obvio que cantas máis materias haxa suspensas menor grao se acada nas competencias».

En septiembre no se puede evaluar de materia nueva de este trimestre

La otra cuestión que parece no haberse tratado a fondo es la opción de septiembre. El examen de recuperación, que seguramente se podrá hacer de forma presencial, servirá para aupar a los alumnos más rezagados, algo que ya ocurre año tras año. Y la Xunta recalca en sus FAQ (un compendio de preguntas frecuentes) del tercer trimestre: «O referente son as aprendizaxes durante os dous primeiros trimestres. A parte de materia que se puidese ter avanzado no terceiro trimestre non entrará na proba extraordinaria».

Como guinda de este pastel tan complicado de realizar está la burocracia. Cada repetición debe ir acompañada de un informe completo de los puntos en que falló el alumno y aquellos que superó, además de un plan de trabajo y recuperación para el próximo curso. Este informe tan exhaustivo no se solía hacer hasta ahora.