La Xunta extiende la tala al procedimiento exprés para ahorrarse 15.000 trámites

Juan María Capeáns Garrido
JUAN CAPEÁNS SANTIAGO

GALICIA

Tala en una fraga, en una imagen de archivo
Tala en una fraga, en una imagen de archivo Paco Rodríguez

Los aprovechamientos de madera en terrenos protegidos precisarán solo una declaración responsable

02 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Tres consellerías con distintas competencias sobre los suelos forestales -Medio Rural, Medio Ambiente e Infraestructuras- han aprobado el nuevo proceso que permite a los propietarios de terrenos con algún tipo de protección pública talar determinados ejemplares sin necesidad de esperar por la autorización de la Xunta, que podía demorarse varias semanas.

Las cortas forestales se incorporan así a la implantación progresiva de una nueva relación entre la Administración gallega y sus administrados, un modelo que está extendiendo a todos los frentes posibles y que se basa en la confianza previa en la buena voluntad del solicitante, que tan solo debe cumplimentar una declaración responsable. A partir del momento en que ese documento entra en los registros de la Xunta ya se puede actuar, lo que no impide que haya inspecciones con posterioridad y la imposición de sanciones en el caso de no ajustarse a la declaración.

En este ocasión, las consellerías van a ahorrarse unos 15.000 trámites anuales, lo que permitirá a los funcionarios centrarse en la agilización de otras gestiones de mayor complejidad que sí requieren una revisión previa. Los solicitantes, por su parte, se ahorran tiempos de espera que dependían de la carga de trabajo puntual y podrán resolver la declaración con sencillez, sin gastos y por vía telemática. Las especies que se incluyen en la orden son el eucalipto, el pino del país, el pino de Monterrei, el de Oregón y la acacia negra, aunque son las dos primeras las más cortadas de Galicia con gran diferencia.

El texto incluye los condicionantes que emanan de otras normativas referidas a ámbitos de protección públicos, como pueden ser las distancias mínimas de plantación recogidas en la Lei de prevención de incendios o los márgenes fijados para las carreteras autonómicas o los ríos, que son los terrenos con algún tipo de restricción pública a la que se refiere la orden.

El nuevo procedimiento evitará una pequeña parte de los trámites que ya no están llegando a la Xunta por solventarse con modelos de declaraciones responsables que cada consellería pone a disposición. En los últimos meses ya no hay que pedir autorizaciones para retirar árboles de los ríos, para realizar obras menores de rehabilitación en casas -pintar, retejar, cambiar ventanas...- o incluso para celebrar conciertos en locales de hostelería.