Hamburgo es el punto más septentrional en el que ha aparecido un ejemplar de avispa asiática; los científicos estudian si es un hallazgo ocasional o un movimiento natural
21 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.En España, y de forma especial en Galicia, la velutina ha encontrado un ecosistema propicio para su expansión. Desde su llegada a la costa gallega hace ocho años ha ido tomando posiciones y hoy se ha expandido ya por las cuatro provincias. Le gustaba la costa y huía del frío, se creía inicialmente. Pero la avispa asiática ya se ha aclimatado al interior, a la montaña y a las bajas temperaturas. Y no solo en Galicia: en Europa se va expandiendo cada vez más hacia el norte, y los últimos estudios la localizan en Hamburgo, el punto más septentrional hasta ahora conocido en el que ha sido detectado un ejemplar vivo.
El hallazgo se realizó en septiembre, y el estudio se publicó en febrero en la revista Evolutionary Systematics. Sus responsables, investigadores del Centro de Historia Natural de Hamburgo: Martin Husemann, Andreas Sterr, Swen Maack y Rudolf Abraham, que iniciaron su investigación tras la aparición de una obrera de velutina en una sala de la empresa Neumann & Müller. Una compañía que no realizaba operaciones de importación ni de exportación y que en ese momento no había entregado bienes en áreas donde ya existía la especie. ¿Había llegado allí por sí misma?
La avispa asiática no era desconocida en Alemania. Al menos desde el 2017 tenía presencia ya en estados del sur como Renania-Palatinado, Waden-Wurtemberg o Hesse. Pero nunca tan al norte. Los investigadores creen que para saber a ciencia cierta si la presencia de ese ejemplar es o no accidental habrá que monitorizar el área y, por tanto, será la observación del entorno en las próximas semanas la que permita determinarlo. En todo caso, teniendo en cuenta la rápida expansión de la especie y su tolerancia a las variaciones climáticas, consideran bastante probable que esa velutina haya llegado a Hamburgo de manera natural y que la especie consiga reproducirse allí. Por eso recomiendan vigilar su presencia y, en caso de que se detecten colonias, la adopción de medidas inmediatas, dado el impacto, recalcan, de esta especie invasora sobre las actividades apícolas.
Hamburgo es el punto más septentrional en el que se ha localizado la avispa asiática en Europa, pero hacia el sur de la ciudad alemana el continente europeo está ya colonizado, con mayor o menor intensidad, por este insecto. Su presencia es generalizada en toda Francia, el primer país de Europa al que llegó. Se cree que lo hizo en un barco que, procedente del puerto de Yunnan (China) atracó en el año 2004 en Burdeos. El buque venía cargado de contenedores con recipientes de cerámica para el cultivo de bonsáis, y en ellos llegó al menos una reina en hibernación. Quince años después, la especie está ya extendida por toda Francia. Se ha localizado en el norte de Italia, en algunas zonas de Alemania, en Bélgica, Suiza e incluso en el Reino Unido. También en Portugal avanza a buen ritmo, extendiéndose en este caso hacia el sur desde la orilla del Miño, donde fue detectada por primer vez.
En España, la velutina tiene presencia ya en toda la cornisa norte y comienza a introducirse en Extremadura aprovechando el curso del Tajo. Hasta el momento, Baleares es la una comunidad a la que ha llegado que parece haber conseguido eliminarla con éxito. La detección precoz de su presencia y el carácter insular de la región contribuyeron a ello.
Mientras, en Galicia la presencia de la avispa asiática es masiva, desde que llegó en el 2012. En la comunidad se expandió a partir de dos poblaciones diferentes, una en Burela y otra en el Miño, no se sabe a ciencia cierta si en la parte portuguesa o gallega. Primero se extendió por la costa y después, siguiendo inicialmente el curso de los ríos, fue penetrando hacia el interior.
Los investigadores franceses fueron los primeros en tratar de buscar medidas para frenar la invasión de esta especie que afecta sobre todo a la población de abejas, ya que la captura para alimentar a sus larvas. Posteriormente se fueron sumando científicos de todas las zonas afectadas. Esos estudios han dado pasos parciales, pero por el momento no se ha conseguido un remedio efectivo para frenar el avance de la avispa asiática y mayoritariamente se recurre a la colocación de trampas para capturar a las reinas y evitar así la formación de nuevas colonias y a la eliminación de nidos.
El dispositivo gallego de retirada de nidos sigue funcionando y recibe una media de 23 avisos cada día
El 20 de enero de este año comenzaba a funcionar en Galicia un dispositivo centralizado de retirada de nidos que había sido acordado por la Xunta y la Fegamp y cuya aplicación fue encargada a la empresa Seaga. Desde el inicio del 2020 hasta el momento en el que el nuevo sistema comenzó a funcionar se habían retirado en Galicia 343 nidos de velutina. Desde entonces se recibieron 1.355 avisos en las cuatro provincias, de manera que desde principios de año se atendieron 1.698 avisos, una media de 23 cada día.
Dos de cada tres de estas peticiones para que se destruyan nidos llegaron desde las provincias de A Coruña y Pontevedra, 575 y 516 respectivamente, mientras que en Lugo fueron 266 y en Ourense, 341. Desde la Consellería de Presidencia indican que actualmente están atendidos todos los avisos que se produjeron desde el 1 de enero.
Precisamente, una de las directrices con las que arrancó este sistema homogéneo al que se sumaron ya más de 270 ayuntamientos gallegos es el establecimiento de un plazo máximo de cinco días desde que se produce el aviso para que el nido sea retirado, salvo en casos en los que se encuentre a una altura mayor de 25 metros o en lugares de muy difícil acceso.
Paralelamente a la retirada de nidos, los apicultores han comenzado ya a colocar las trampas con las que se intentará capturar a las reinas durante la campaña primaveral. Se trata de evitar así la formación del mayor número de nidos posible. A través de ese plan conjunto de Xunta y concellos, dotado con 2,3 millones de euros, se están repartiendo trampas y líquido atrayente.
Además, muchos apicultores y personas que tienen fincas o jardines recurren a trampas caseras. La más eficaz, dicen, porque además no afecta tanto a otros insectos, es la mezcla de agua, azúcar y levadura. La receta se elabora con cinco litros de agua, dos de azúcar y 50 gramos de levadura de pan. Se vierte en una trampa, comercial o casera, y se coloca en los árboles. Camelios y especies de origen asiático son los preferidos de la velutina.