La venta de billetes que se cerró en 10 estaciones seguirá con nuevo personal

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

En estaciones como la de Viveiro la máquina de autoventa no funcionaba y el personal del ADIF no podía atender a los usuarios
En estaciones como la de Viveiro la máquina de autoventa no funcionaba y el personal del ADIF no podía atender a los usuarios VÍTOR MEJUTO

Renfe acude a las bolsas de empleo municipales y el ADIF, a la empresa Ilunion de la ONCE

05 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Parece que la polémica por los canales de venta suprimidos a principios de año en estaciones rurales de todo el país y en diez terminales gallegas va a tener un desenlace que puede dar continuidad a este servicio, después del período de transición en el que el personal del ADIF siguió en muchos casos ofreciendo este servicio, compaginándolo con sus funciones relacionadas con la seguridad y la circulación. Esta solución transitoria vino dada por la formación del nuevo Gobierno y su pacto con la formación Teruel Existe, que reclamó una moratoria en el cierre de los canales presenciales de venta mientras se exploraba una solución para estas estaciones.

Parece que esta solución ya está en vías de ser una realidad, pues en un principio el ADIF se había comprometido a mantener la situación anterior hasta el 31 de marzo, con la posibilidad de prorrogarlo hasta junio. Y así lo está haciendo en la actualidad en Galicia en todas las estaciones afectadas por esta decisión, excepto en Ribadavia y O Carballiño.

Así, el ADIF adjudicó recientemente a la empresa Ilunion el servicio de información, atención al cliente y venta de billetes en las estaciones de Guillarei, O Carballiño, Ribadavia y Sarria. El nuevo personal contratado para estos puestos también se ocuparán de «servicios básicos y complementarios» en estas estaciones. Se trata de un contrato por un año al que se subroga Renfe, pues el convenio entre ambas empresas públicas y la futura liberalización del transporte ferroviario deja en manos de las operadoras ferroviarias los canales de venta, pues el ADIF debe actuar como administrador neutral de la red y del resto de infraestructuras ferroviarias. Ilunion es el apéndice empresarial de la ONCE, con el compromiso de crear empleo para personas con distintos tipos de discapacidad.

En las estaciones de Burela, Ortigueira, Redondela, Ribadeo, Viveiro y Xubia será Renfe la que asuma directamente la atención presencial, pero también con nuevo personal. En este caso contratará a través de su filial Logirrail a los empleados «que sean precisos», aseguraron fuentes de la operadora ferroviaria pública. Este personal se seleccionará entre las personas apuntadas en las oficinas o en las bolsas municipales de empleo, un proceso para el que los representantes de Renfe estuvieron «en comunicación directa con los ayuntamientos para coordinar todo el proceso», aseguraron las mismas fuentes.

Malestar por el cierre

El cierre de los canales de venta presenciales, unido a que las máquinas de autoventa instaladas no funcionaban, causó gran malestar en todos los ámbitos, pero especialmente entre los usuarios de las líneas ferroviarias afectadas. Incluso suscitó una declaración unánime de los grupos políticos del Parlamento gallego el 5 de febrero para que el Gobierno garantizara la venta presencial de billetes en las estaciones afectadas.

El pacto con Teruel Existe, además, incluía la necesidad de hacer una reflexión sobre el futuro de las líneas ferroviarias rurales, sometidas a un deterioro progresivo no solo durante los años de la crisis económica, sino desde mucho antes. Cuando España apostó legítimamente por llevar las líneas de alta velocidad a todas las esquinas del país, pero dejando de lado el tren de proximidad en las zonas menos pobladas.