Las listas de Cs en las municipales se abrieron a varios concejales populares
01 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El fracaso de Ciudadanos en las autonómicas del 2016, a pesar de que Albert Rivera se involucró al máximo, llevó a pensar a los dirigentes naranjas que tenían que abonar el terreno para captar a cuadros del PP con los que dotar de pedigrí político a las listas que presentarán a las próximas elecciones gallegas. Se hizo evidente con las múltiples conversaciones en Galicia y Madrid que mantuvieron con Javier Guerra, se tentó incluso a más de un parlamentario popular, y se alisó el terreno abriendo las listas de las municipales a varios concejales conservadores que habían perdido pie en su formación.
El resultado fue apenas mil votos más en las municipales, aunque doblando su número de ediles, de 16 a 33, aunque sin apenas influencia en los gobiernos locales. Al cabo de unos meses, además, les llegó la pérdida de sus dos escaños en el Congreso, quedando sextos en Galicia por detrás del Bloque y Vox, cuando en las autonómicas habían sido quintos. La última encuesta de Sondaxe deja a Cs muy lejos incluso de poder pensar en alcanzar la barrera del 5 % de los votos exigida para entrar en el Parlamento.
Con dichos antecedentes un pacto que le dé a Cs opción de presentarse como semejantes o iguales con el PPdeG sería su pasaporte de entrada en la política autonómica, ya fuese con la inclusión de candidatos suyos en las papeletas populares o una coalición con reparto de puestos. Eso sí, de repetir Cs sus 63.571 votos en las generales, los 48.103 de las autonómicas o los 28.738 de las municipales podrían llevar al PP a ceder la Xunta, aunque los naranja no obtuviesen escaño.
