Culpan a Aznar del aumento de la concesión, pero esperan que Sánchez frene «la injusticia»
04 ene 2020 . Actualizado a las 21:34 h.Alcaldes del PSOE y grupos de gobierno con presencia socialista de las principales localidades por las que discurre la AP-9 han dado el paso de oponerse públicamente a las subidas extraordinarias de los peajes de la autopista gallega y demandar que el nuevo Ejecutivo frene la escalada que le ha llevado a ser la concesión que más se ha encarecido de toda España.
Tras reclamar Abel Caballero el jueves una «rebaja importante» del peaje entre Vigo y Pontevedra, otros regidores socialistas se alinearon ayer con la demanda de minoración de esas subidas. Los alcaldes de A Coruña, Santiago, Ferrol, Vilagarcía, Redondela, Tui, Betanzos, Culleredo, Miño y Bergondo coinciden en reclamar rebajas en tramos concretos o en todo el vial, mientras el secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, anunció que «estudiaranse vías de futuro que posibiliten reducir o custe da peaxe. Ese é o meu compromiso», dijo.
Los regidores consultados por La Voz coinciden, eso sí, en culpar a Aznar de la ampliación de la concesión y los peajes hasta el 2048 en lugar de finalizar en el 2023. Inés Rey, alcaldesa de A Coruña, considera que «los gallegos estamos condicionados por la ampliación del plazo que realizó el PP», lo que no obsta para añadir que «consideramos conveniente que el Gobierno central pueda estudiar formulas que permitan revertir esta situación», renegociando incluso la concesión y la aplicación de rebajas.
Su homólogo de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, incide en la «enorme gamberrada» que a su juicio constituyó la privatización de la empresa que explotaba la AP-9 y la prolongación de su concesión. Es para él un agravio comparativo que empeora con la reciente eliminación de peajes en el mediterráneo (AP-7 y AP-4). Bugallo reclama una rebaja para toda la AP-9, pero considera que es la Xunta quien tiene que negociarla con el Gobierno, no sin obviar que «o máis xusto» es que las subidas las asumiese Fomento.
El alcalde ferrolano, Ángel Mato, avanza que en cuanto haya nuevo Gobierno insistirá en demandar una solución que haga que «no sea tan gravoso que Ferrol esté conectado a las principales vías de comunicación», dice considerando a su municipio como uno de los más afectados por las subidas.
Alberto Varela, alcalde de Vilagarcía y además representante de los regidores gallegos (preside la Fegamp), subraya que las subidas son «una desagradable herencia que nos dejó el PP». Asegura que «el problema [que genera el incremento de peajes] ya se trasladó al Gobierno en funciones, que nos comunicó que es un asunto prioritario en su agenda y que se iban a buscar medidas para revertir la situación».
María Barral, alcaldesa de Betanzos, es rotunda: «a subida das peaxes é inceptable» y reclama su eliminación en Guísamo y Macenda, como el regidor de Culleredo, José Ramón Rioboo, lo pide para Bergondo al igual que se hizo en el 2006 en A Barcala y Rande.
La alcaldesa de Bergondo, Alejandra Pérez, considera «abusiva» la subida continuada en la AP-9 y pide una rebaja que ayude a aliviar la nacional VI, como el regidor de Miño, Manuel Vázquez, reclama a las administraciones que «tomen medidas». Digna Rivas, regidora de Redondela, anuncia que mantendrá la petición de que se elimine el peaje más caro de España, el que da acceso a su villa, además de oponerse a las subidas, como lo hace Enrique Cabaleiro (Tui), que tacha incluso de «atraco» el peaje entre Vigo y la frontera y exige «su supresión como en la AP-7».
Con información de Carlos Punzón, Eduardo Eiroa, Rosa Martínez, Dolores Vázquez, Rocío Pita y Rosa Estévez
Fomento lanza un carrusel de licitaciones en Galicia en medio de las críticas por la autopista
En medio de las críticas por las subidas extraordinarias de los peajes de la AP-9 para este año, la eliminación del pago en las autopistas de Sevilla a Cádiz y de Tarragona a Alicante, y la decisión de destinar más de 180 millones de euros a mantener estas autopistas gratuitas y las nueve quebradas, el Ministerio de Fomento lanzó ayer tres licitaciones en Galicia por casi 38 millones de euros.
Sin esperar si quiera a la conformación del nuevo Ejecutivo, el departamento de Ábalos puso en marcha una demanda de larga antigüedad en Santiago, como es el llamado enlace Orbital, que conectará precisamente la AP-9 con la autovía A-54 (autovía Santiago-Lugo) en San Marcos. Uno de sus objetivos es descongestionar el enlace de Santiago norte en la AP-9 en horas punta. La obra es sacada a concurso con un presupuesto de 25,13 millones de euros.
También en Santiago, Fomento licitó por 241.903 euros la rehabilitación del vial periférico SC-20 entre el polígono del Tambre y la glorieta de Milladoiro. Y finalmente en Perillo (Oleiros), la construcción de un nuevo enlace en la AC-12 con una glorieta elevada para reordenar uno de los principales accesos a A Coruña: 50.000 vehículos cada jornada.