Tráfico envía a 237 gallegos a revisión médica por pérdida de facultades

José Manuel Pan
José Manuel Pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Muchos de los expedientes de revisión se inician tras una infracción en la carretera detectada por la Guardia Civil
Muchos de los expedientes de revisión se inician tras una infracción en la carretera detectada por la Guardia Civil ALBERTO LÓPEZ

Esos conductores podrían perder el carné, o mantenerlo aunque con restricciones

15 nov 2019 . Actualizado a las 20:31 h.

Los que acceden en sentido contrario a una autovía, los que cometen una grave infracción, los que realizan alguna maniobra aparentemente inexplicable o los que provocan un accidente. Esos son los conductores que son propuestos para someterse a revisiones médicas extraordinarias cuando los agentes de la Guardia Civil de Tráfico o de las distintas policías locales sospechan que sufren algún tipo de desorientación o alguna merma en sus condiciones psicofísicas. La mayoría de los conductores que son propuestos para revisión médica son personas de edad avanzada que muestran algún deterioro incompatible con la conducción de un vehículo, o al menos con una conducción sin restricciones.

En solo seis meses, entre enero y junio de este año, Tráfico abrió en Galicia 237 procedimientos de pérdida de vigencia del carné por posible disminución de condiciones psicofísicas a conductores cuyos expedientes han llegado a alguna de las cuatro jefaturas provinciales gallegas, en donde han considerado que es necesario que se sometan a una revisión médica extraordinaria. Con ese reconocimiento especial se trata de saber si esos automovilistas son aptos para seguir conduciendo o si, por el contrario, deben tener limitaciones o dejar de conducir definitivamente. La mayoría de los conductores (88) pertenecen a la provincia de A Coruña. Les siguen los de Pontevedra, con 53 conductores; los de Lugo, con 51, y los de Ourense, 45 automovilistas.

La edad media de los conductores remitidos a los servicios del Sergas para una revisión médica extraordinaria ronda los 65 años. Tráfico ha resuelto 57 de esos casos, 21 de ellos con resultado favorable para los automovilistas, que han sido declarados aptos tras el examen médico. En 26 ocasiones el resultado ha sido de apto con restricciones, mientras que 5 de los conductores analizados no han superado las pruebas médicas y han perdido la vigencia del carné por falta de condiciones psicofísicas para seguir al volante.

El envejecimiento de la población en Galicia ha traído un aumento del número de conductores de edad avanzada que se desplazan por las carreteras de la comunidad. Las autoridades son conscientes de ello y por eso se hacen más controles para constatar que se encuentran en perfecto estado para conducir. Esto se viene haciendo de manera habitual porque a determinadas edades es posible que se produzcan cambios importantes tras haber pasado el examen psicotécnico en un centro de reconocimiento de conductores. Solo la Guardia Civil de Tráfico ha realizado en los últimos cinco años 1.266 propuestas para revisión médica extraordinaria de conductores en Galicia, como explicó el teniente coronel Francisco Javier Molano, jefe del Sector de Tráfico de Galicia, en el decimocuarto Foro contra la Violencia Vial organizado la pasada semana por Stop Accidentes en Madrid.

El 33 % de esos conductores enviados a revisión extraordinaria fueron calificados con informe desfavorable, en 314 casos fueron considerados no aptos para seguir al volante, mientras que 110 pudieron seguir conduciendo, aunque con las restricciones que les fueron impuestas. Obtuvieron calificación de apto 354 de los automovilistas examinados, mientras que 43 ya no fueron propuestos por la correspondiente jefatura de Tráfico y en 445 casos aún no hubo resolución.

Reclaman que los psicotécnicos accedan al historial médico

El aumento de conductores de edades avanzadas preocupa a los responsables de Tráfico. El Foro contra la Violencia Vial de Stop Accidentes contaba con un apartado específico dedicado a la movilidad de las personas mayores, en el que se buscaba conocer los factores que pueden influir en la siniestralidad de este colectivo para poder adoptar mecanismos preventivos. En ese foro, el teniente coronel Molano señaló que es necesario un aumento de la sensibilización sobre el tema de los conductores mayores y pidió una mayor intervención del entorno del conductor de edad avanzada.

 

Precisamente, es la familia una de las partes que suele pedirle a los responsables de Tráfico que se le haga un examen complementario al conductor mayor que, pese a todo, ha sido considerado apto por el centro de reconocimiento en el que se ha hecho la revisión ordinaria. Esos familiares saben que tiene alguna merma en sus capacidades psicofísicas que le impiden conducir de forma satisfactoria.

La presidenta de Stop Accidentes, Ana Novella, pidió que se pusiese el foco en los mayores de 65 años, un colectivo que supone el 27 % de las muertes de tráfico en el conjunto de España y que seguirá aumentando por el envejecimiento de la población. A su juicio, habría que gestionar esta situación y ver la forma de cruzar datos con los servicios públicos sanitarios para que los centros de reconocimiento de conductores cuenten con la máxima información a la hora de examinar a los automovilistas.

Rediseñar los psicotécnicos

Esa misma petición la realizó el fiscal coordinador de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, quien abogó por que los centros autorizados para hacer los reconocimientos médicos del carné de conducir se rediseñen y estén unidos a los de atención primaria. «Hay que rediseñar esos centros, porque no tiene sentido que estén desconectados de los centros de atención primaria», dijo. La accidentalidad de los conductores mayores también empieza a preocupar, como quedó expuesto en el foro de Stop Accidentes. En lo que va de año en las carreteras gallegas han muerto 8 conductores mayores de 65 años. Cuatro de esos conductores tenían más de 80 años y uno de ellos tenía 92.

En total, en Galicia este año han perdido la vida 19 personas mayores de 65 años y cinco de ellas eran peatones que fueron atropellados cuando cruzaban la carretera, casi siempre en el entorno de su domicilio. Esta es la peor época del año para los peatones, ya que se reduce mucho la visibilidad, por lo que es necesario que lleven algún tipo de prenda reflectante.