El Consorcio obliga a cambiar los proveedores de comida de 80 escuelas infantiles tras las intoxicaciones alimentarias

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO

GALICIA

SANDRA ALONSO

La medida afecta a todas las guarderías cuya cocina está gestionada por la misma empresa

07 nov 2019 . Actualizado a las 20:16 h.

El Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar ha obligado a la empresa Freire Chico S. L. a cambiar los proveedores de comida de todas las escuelas infantiles públicas cuya cocina gestiona, tras los dos brotes de intoxicaciones que se registraron el pasado 18 de octubre y esta misma semana. 

Así, la empresa, ya desde mañana jueves y de modo indefinido, deberá comprar los alimentos y el menaje de cocina en establecimientos de proximidad de cada escuela infantil, y no a través de los mismos proveedores centralizados. Esta medida preventiva se implanta no solo en las escuelas en donde algún niño tuvo una reacción alérgica, sino en todas las que sirve esta empresa, ochenta en total. Todos los nuevos proveedores deben contar con las acreditaciones necesarias para garantizar la trazabilidad de los productos.

Paralelamente, añade el Consorcio, la Consellería de Sanidade está realizando una investigación para determinar el origen de la intoxicación, analizando muestras de la comida que se sirvió en los días de las reacciones. También se están llevando a cabo inspecciones en la sede de la empresa concesionaria. 

El Consorcio ha transmitido tranquilidad a las familias dado que las reacciones alérgicas fueron leves en todos los casos. No obstante, insisten desde la Xunta «os episodios que aconteceron son intolerables e seguiranse tomando todas as medidas que sexan necesarias». 

Entre 15 y 20 escuelas infantiles se han visto afectadas por esta intoxicación leve cuyo origen aún se investiga. El pasado 18 de octubre ocurrió lo mismo tras un menú servido por la misma empresa de cáterin, al presentar la palometa niveles de histamina más altos de lo debido. En este caso Sanidade todavía no ha concluido su investigación, por lo que se desconoce qué alimento causó la intoxicación. Los pequeños comieron crema de brécol con calabaza y raxo de pollo con macarrones, y la intoxicación fue más leve que la anterior, con rojeces y manchas rojas alrededor de la boca. En cuanto al número de pequeños afectados, desde la Consellería de Política Social, de la que dependen las escuelas infantiles, no dan datos sobre el número porque en algunos casos los padres ni siquiera comunicaron la reacción alérgica. En esta jornada de miércoles, recuerdan, no se detectó ningún caso nuevo de intoxicación.