Ciclón Amelie: Los fuertes vientos y la lluvia dejan más de un centenar de incidentes por toda Galicia

Redacción / La Voz

GALICIA

Gardacostas de Galicia

Las fuertes rachas de viento, de hasta 150 kilómetros por hora, derribaron árboles, tendidos eléctricos, barandillas y antenas, especialmente en las provincias de A Coruña y Lugo

03 nov 2019 . Actualizado a las 14:56 h.

El ciclón Amelie, un sistema de bajas presiones extratropical situado cerca de Galicia, ha dejado un rastro de incidentes por toda la comunidad. Las fuertes rachas de viento han provocado la caída de árboles, barandillas y antenas, así como han obligado a un buen número de buques a tomar refugio para evitar problemas. El 112 contabilizaba a primera hora de la mañana más de un centenar de incidencias repartidas por las cuatro provincias.

En la costa de A Coruña, el Ayuntamiento precintó los accesos a las playas y a la costa en la zona del Millenium, las Esclavas y Riazor y Orzán. Y es que el mar incluso superó la duna del arenal. Desde el Concello alertan del peligro que supone saltarse las medidas de seguridad. De hecho, los bomberos, Protección Civil y la Policía Local realizan ya un seguimiento y control por todo el paseo marítimo.

Salvamento Marítimo tuvo que coordinar el rescate, por parte del Pesca 1 de dos tripulantes del crucero inglés Queen Victoria, a la altura del Faro de Corrubedo. 

El fuerte mar de fondo obligó a dos buques tanque a fondear en la ría de Ares a la espera de que amaine el temporal para poder atracar en los muelles de Repsol. Además, los bomberos del parque de A Grela tuvieron que realizar una decena de salidas durante la pasada madrugada. Fue necesario su servicio para retirar una antena, barandillas, unas vallas que cayeron sobre un coche a la altura del número 16 de San Andrés, o asegurar una galería de una casa de María Pita que amenazaba con caer sobre la plaza debido a su deteriorado estado. De hecho, desde la unidad contraincendios se comunicó esta deficiencia a los técnicos del servicio de Ruinas.

En la zona de Ferrolterra, el temporal de viento, con rachas que alcanzaron los 156 kilómetros por hora en el faro de Estaca de Bares, en Mañón, provocó el derribo de árboles en varios puntos de la comarca, tiró farolas, toldos, vallas y postes de la luz. En Cedeira, un operativo conjunto de Policía Local y Protección Civil tuvo que acudir a San Isidro para retirar un árbol que atravesaba la vía e impedía la circulación.

Por su parte, el GES de Mugardos atendió numerosas llamadas durante la noche, con hasta tres árboles ocupando un tramo de 200 metros de una carretera. También recibieron avisos por farolas caídas y tuvieron que apartar el toldo de un negocio que se había llevado el viento. La Policía Local de Fene se ha desplazado esta mañana a Sillobre por la caída de un poste del tendido eléctrico y recibió varios avisos por ramas desprendidas sobre la vía pública. Los Bomberos del Eume se movilizaron de madrugada para asegurar el balcón de una vivienda de Pontedeume, por la caída de cristales de una ventana a la calle, mientras que el GES de Ortigueira atendió varias alertas, por un árbol caído en Barrosoto, chapas del edificio situado frente al cuartel de la Guardia Civil que salieron volando, contenedores y vallas.  

En A Mariña lucense, las rachas de viento se acercaron a los 150 kilómetros por hora en el monte Penedo do Galo. Cerca de Viveiro, en San Cibrao, reventaron las amarras de la lancha recreativa Lugués, la arrastró mar adentro y la echó a pique contra una zona rocosa. En medio del fuerte temporal, el dueño de la embarcación y su tío salieron a remo en otra embarcación para intentar rescartarla. No lo lograron y, por fortuna, salieron indemnes y lograron regresar al muelle. 

Un reguero de problemas

Además de esa incidencia, la borrasca provocó distintos problemas en otros municipios de A Mariña. Protección Civil de Viveiro tuvo que cortar y retirar un árbol que cayó sobre el puente en Chavín, cortando el tráfico en ese vial. También Protección Civil de Ourol intervino por la caída de decenas de ramas en distintos puntos de un ayuntamiento donde Conservación de Carreteras de la Diputación retiró un eucalipto tumbado por el viento en la carretera Ourol-Miñotos. El Grupo de Emerxencias Supramunicipal de A Pontenova sacó de un vial secundario un árbol que obstaculizaba parcialmente el acceso a viviendas en As Cruces y Protección Civil de Mondoñedo retiró árboles caídos sobre carreteras en Lindín, en la zona de Calzada, donde impidió el paso a una panadera, así como en Cesuras, Curuxeiras y Argomoso.

En Burela, Protección Civil recibió avisos porque el viento se llevó algunas placas de chapas empleadas para cubrir fachadas y por la caída de un cable del alumbrado público en Vila do Medio. A los servicios de Protección Civil de Ribadeo, Barreiros y Foz no recurrió nadie por percances ocasionados por Amelie. Y al de O Vicedo lo avisaron para retirar unas ramas en la carretera de Alto de Moreiras.

Lo cierto es que el 112 Galicia contabilizó más de un centenar de incidentes relacionados con la profunda borrasca, la mayoría en las provincias de A Coruña (70) y Lugo (31). En Ourense apenas se contabilizaron seis salidas, por 30 en la de Pontevedra. El episodio más grave en esta última ocurrió en Mourente a causa de la caída de un árbol sogre un coche. Afortunadamente no se registraron daños personales.