Los padres de una menor de O Carballiño piden que el bus escolar la recoja cerca de casa para evitar peligros
12 oct 2019 . Actualizado a las 19:33 h.Hace tres meses, Uxía Blasi se mudó con sus padres a la aldea de Fonteantiga, en San Pedro de Barón, en O Carballiño. Un lugar tranquilo con apenas 5 vecinos (ella, sus padres y un matrimonio mayor), que está a cinco minutos en coche del casco urbano y que dista apenas 400 metros de la carretera. Un lugar demasiado tranquilo en determinados momentos. A las ocho de la mañana, cuando la menor tiene que coger el bus para ir al IES Chamoso Lamas, en el pueblo no hay nadie por las calles, el camino hacia la carretera apenas tiene puntos de luz y está rodeado de monte. Una combinación que los padres consideran demasiado arriesgada para que Uxía vaya sola. Es por eso que reclaman que el bus escolar la recoja en la aldea. «Co que está pasando por aí, ¿como vai ir soa unha nena de 14 anos polo medio do monte de noite?», se pregunta el padre, Sergio Blasi. Entiende que 400 metros pueden parecer poco recorrido, «e é pouco camiño se os rapaces van acompañados, e polo medio dunha cidade onde hai policía e veciños; pero non cando é por unha zona sen xente».
En estas primeras semanas de clase es Sergio quien va con la menor hasta la parada y espera con ella el bus. Pero esa posibilidad desaparecerá en cuanto se reincorpore a su trabajo. «A miña muller e eu traballamos por quendas, e non temos a ninguén que vaia coa rapaza», resalta el progenitor. Niega que se trate de un capricho, que pedir que recojan a la niña cerca de casa es un tema de seguridad. Y entonces vuelve a nombrar el camino por el monte, casi a oscuras (a las ocho de la mañana todavía no es pleno día, y peor será según vaya avanzando el invierno). «Hai que pensar que unha vez na parada, queda alí soa», resalta de nuevo.
Uxía y sus padres no están solos en su reivindicación. El ANPA del IES Chamoso Lamas ha presentado un escrito a la Xunta reclamando «un medio de transporte adecuado» que entre en Fonteantiga a recogerla. Argumentan que si baja el camión de recogida de basura, también debería poder hacerlo un bus, o si no un microbús, una furgoneta o un taxi. «Hai que pensar na integridade da nena, porque de noite, alí esperando a escuras... coas novas que saen cada día, os pais están temerosos», resalta el presidente, Manuel Chan,.
El tema también llegará al Parlamento. En Marea ha registrado una pregunta sobre este asunto, así como una iniciativa para instar a la Xunta a reconsiderar su política de transporte escolar en el medio rural. Acercar el servicio a todos los niños que lo necesiten, argumenta el diputado David Rodríguez, es una medida indispensable para fijar población en el rural. Es la idea en la que inciden también Chan y Blasi. «Todo o día oímos que o goberno aposta polo rural, pois que o demostre con feitos», esgrime el presidente de la asociación de padres. Blasi, por su parte, añade: «Pintan moi bonito o de vir vivir ao rural, pero o máis básico, que é o transporte escolar para ir ao colexio, é o que falta».
Desde la Xunta explican que se cumple la normativa (la ley obliga a ofrecer transporte a los niños que vivan a más de 2 kilómetros de su centro) y que la parada se colocó en la carretera porque, debido a la estrechez de las calles del pueblo, es difícil entrar con el autobús. Remarcan que son apenas 400 metros. 400 metros sola.