El reo regresaba de un permiso de fin de semana y escondía entre sus pertenencias y en su cuerpo 400 gramos de hachís
01 oct 2019 . Actualizado a las 15:13 h.Funcionarios del penal de Teixeiro confiscaron una importante cantidad de droga a un preso que regresaba de disfrutar un permiso de fin de semana. Dos días libres en los que el reo aprovechó para armarse de estupefacientes con el presunto ánimo de venderlos entre la comunidad reclusa una vez superados todos los controles de acceso. Los funcionarios empezaron con 400 gramos de hachís repartidos en 39 paquetes con forma de bellota. También se confiscaron entre sus enseres más de 100 pastillas anabolizantes que, al parecer, tendrían salida entre los presos que más horas invierten en el gimnasio de la cárcel. También se cogió una bolsa con un polvo que podría ser cocaína o heroína y que será analizada. Pero los funcionarios, lejos de quedarse ahí, invitaron al preso —condenado a 7 años medio por encadenar robos con fuerza— a pasar por el escáner para saber qué escondía dentro de su cuerpo. La radiografía evidenció la presencia de al menos otras bellotas de hachís que el reo expulsó, en el plazo de dos días, en el Hospital de Universitario de A Coruña.
La colaboración de la Guardia Civil fue crucial. Los agentes custodiaron al reo desde Teixeiero al complejo hospitalario para no perderlo de vista en ningún momento y evitar que, por ejemplo, pueda encerrarse en un servicio para expulsar la droga y tirar de la cisterna. El mismo preso, sigue ingresado a la espera de que expulse el resto de bellotas, aún sin cuantificar, que almacena su estómago.