Solo Galicia y Castilla-La Mancha prohíben ya el uso del móvil en clase

Sara Carreira Piñeiro
sara carreira REDACCIÓN / LA VOZDATA / AGENCIA DATA / AGENCIA

GALICIA

MIGUEL VILLAR

Madrid anuncia el veto a los teléfonos si no tiene una aplicación didáctica

24 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El consejero de Educación de Madrid, Enrique Ossorio, ha vuelto a poner de actualidad el uso el uso del teléfono móvil en la escuela tras anunciar en una entrevista en Onda Cero que la comunidad madrileña prohibirá el dispositivo en las aulas, exceptuando, eso sí, los casos en que los profesores quieran darle una aplicación didáctica. Si se cumple este anuncio, Madrid se sumará a las comunidades de Castilla-La Mancha y Galicia, las dos únicas que a día de hoy prohíben a nivel global los móviles en clase.

El resto de comunidades españolas deja la decisión a los consejos escolares, es decir, de cada centro, aunque hay matices entre unas y otras zonas. Así, en Extremadura la Consejería de Educación recomienda que se prohíba el uso del móvil, y en la Región de Murcia el teléfono se puede llevar al colegio pero no dejan usarlo ni que moleste, salvo que así lo indique el profesor. En Cataluña, por su parte, sí acepta que cada centro decida su política en este asunto, aunque el Consell Escolar realizó un informe en el 2018 en el que se recomendaba que los jóvenes usasen los móviles de una forma «moderada, crítica y constructiva»; la propuesta incorporaba un estudio según el cual el 92 % de los institutos de secundaria permitían el dispositivo, una cifra que caía en primaria hasta el 7,56 %. En las restantes comunidades el debate sigue sin estar cerrado.

Todavía no hay un criterio único a raíz de investigaciones completas sobre el uso o no del móvil en el centro educativo. Francia prohibió hace un año los dispositivos en todo el Estado, aunque a falta de legislación regional, los colegios pueden aplicar la norma de una forma más o menos estricta. En principio, ni en primaria ni en secundaria se pueden usar móviles, pero se libera de la prohibición a los alumnos de bachillerato. Su primer año de aplicación de la norma ha resultado un éxito según el ministro de Educación, Jean Michel Blanquer, quien aseguraba al inicio de este curso que los estudiantes dedican más tiempo a la lectura y se han detectado menos casos de acoso, visionado de pornografía y problemas vinculados a la confiscación de aparatos. Las opiniones de Blanquer parece que son solo eso, opiniones, porque todavía no hay ningún estudio publicado en Francia sobre la medida. 

No antes de los 14

En cuanta a la mejor edad para introducirse en el móvil, la mayor parte de los profesores la situaron en los 14 años, aunque según el INE más de la mitad de niños y niñas españoles tiene teléfono ya a los 11 años.

Para los profesores tienen más ventajas que inconvenientes

Este mismo mes, RED: Revista de Educación a Distancia publicaba un estudio realizado por investigadores de tres universidades (la Politécnica de Madrid, la de Alcalá y la de La Rioja) a partir de encuestas a los profesores, El smartphone desde la perspectiva docente ¿una herramienta de tutorización o un catalizador de ciberacoso?

«Las ventajas de utilizar móviles en el aula fueron mejor valoradas que los riesgos»

Los maestros consideraban que «las ventajas de utilizar móviles en el aula fueron mejor valoradas que los riesgos» y entre aquellas destacan que los juegos orientados a atraer el interés del alumno y potenciar su participación tienen una utilidad «muy valorada». La ludificación (gamificación), es decir, ofrecer recompensas y penalizaciones que divierten a los alumnos a la vez que los motivan a conseguir el aprendizaje es la esencia del éxito del móvil en el aula. También les permite conocer otras herramientas del teléfono más allá de las redes sociales y el ocio.

La parte negativa y que más preocupa a los docentes es sin duda el ciberacoso, aunque señalaron otra importante, «la distracción y pérdida del foco de atención» que producen los móviles. El tercer riesgo señalado es «la dificultad para encontrar un consenso entre profesores sobre cómo utilizar el móvil».