El tiempo atmosférico cambiante y poco veraniego les aguó el mes de julio
14 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.La climatología irregular e impropia del verano trae de cabeza al sector turístico desde que se inició la temporada alta. Tras un descenso de la ocupación en las zonas de costa durante el mes de julio, los hosteleros ponen sus esperanzas en el puente de agosto.
César Sánchez, presidente de la Federación de Hostelería de Pontevedra, apunta a una ocupación similar a la de años anteriores porque «la meteorología viene bien». Reconoce que las Rías Baixas son «sensibles a las cancelaciones por la lluvia, porque la gente viene mayoritariamente en coche y varían su ruta en cualquier momento».
En A Coruña se muestran optimistas con las previsiones para este puente. Los alojamientos de la capital herculina rozan el lleno, con una ocupación del 98%, y mejoran precios respecto al año pasado. La directora del hotel Meliá María Pita, Laura Alegre, cuenta que las previsiones meteorológicas solo afectan a las reservas de última hora.
En el interior de Galicia restan importancia a la climatología. Ovidio Fernández, presidente de la Federación de Ourense, explica que «cuando hace mal tiempo el turismo de interior es receptor de los visitantes que no pueden ir a la playa». Aunque estos movimientos no afectan al alojamiento, señala que «la ocupación sigue siendo buena», y aclara que la provincia «tiene turismo todo el año en las termas y la Ribeira Sacra».
De hecho, la zona vinícola marca las mejores previsiones en Lugo, con un 98,2% de ocupación, seguida de cerca por A Mariña, con un 95%. En la provincia esperan una media del 79,5% de ocupación, más alta que en julio.
