La huelga en Renfe arranca con escasa incidencia en Galicia

B.C. / R.S. REDACCIÓN/LA VOZ

GALICIA

Estación de tren de Santiago
Estación de tren de Santiago XOAN A. SOLER

La primera de las cuatro jornadas de paros se desarrolló con normalidad y cumplimiento de los servicios mínimos

31 jul 2019 . Actualizado a las 20:16 h.

La primera de las cuatro jornadas de huelga de Renfe se ha desarrollado con normalidad y con el cumplimiento de los servicios mínimos. Los parones para este miércoles se convocaron de 12.00 a 16.00 y de 20.00 a 24.00, y afectaron a líneas AVE y de larga distancia, así como a los trenes de media distancia y regionales. En las estaciones gallegas, el día transcurrió con bastante normalidad y la huelga no ocasionó grandes prejuicios ni retrasos a los pasajeros.

Algunos viajeros, sobre todo aquellos que realizaron trayectos cortos, se enteraron de la huelga cuando fueron a comprar sus billetes a la estación y se encontraron con que su línea era una de las afectadas por el parón. En estos desplazamientos, la solución fue esperar alrededor de una hora por el siguiente tren. En la venta online, las líneas sin servicio aparecieron con el aviso de que no se encontraban disponibles. Algunas de las conexiones afectadas a lo largo de la mañana fueron las de A Coruña con Vigo y las de Santiago con estas dos. En el caso de la capital gallega, también se cancelaron algunas líneas a última hora del día.

Además de los media distancia y regionales, las líneas que conectan Galicia con Madrid también fueron perjudicadas por el parón. En esta primera jornada, el tren hotel que sale de la capital destino Galicia, previsto para las 22.14 horas, fue uno de los cancelados. En sentido inverso, la línea que llegaba a Madrid a las 9.31 tampoco estuvo disponible.

Los otros días previstos de huelga son el 14 de agosto, el 30 y el 1 de septiembre, que coinciden con las salidas y regresos de las vacaciones de verano. El sindicato convocante -la CGT- cifró en un 85 % el seguimiento de los parones en esta primera jornada, aunque Renfe apunta a un 2,9 % teniendo en cuenta los trabajadores que no estaban afectados por los servicios mínimos. La CGT, que denunció «trabas» por parte de la dirección de Renfe, reclama un aumento de las tasas de reposición de la plantilla y critica la externalización de las cargas de trabajo públicas.