Casi cinco mil controles de alcoholemia y menos de cien denuncias durante el San Xoan

REDACCIÓN LA VOZ

GALICIA

Los controles de alcoholemia se incrementaron sustancialmente durante el San Xoán
Los controles de alcoholemia se incrementaron sustancialmente durante el San Xoán gc

La jornada se cerró sin accidentes graves

24 jun 2019 . Actualizado a las 21:22 h.

La noche de San Xoán es una de las más problemáticas en las carreteras gallegas aunque en esta ocasión estuvo afortunadamente exenta de accidentes de gravedad. En alguna medida por la presión ejercida por la Guardia Civil que estableció controles por toda Galicia en los que se efectuaron 4.814 pruebas de alcoholemia que arrojaron 93 denuncias. También hicieron las patrullas 34 pruebas de drogas de las que 12 dieron positivo.

Aunque no hubo accidentes graves, sí se produjeron varias anécdotas entre las que destaca la protagonizada por dos jóvenes en Perillo (Oleiros). Allí, fue interceptado un conductor novel por circular sin cinturón de seguridad. Al ser parado, los agentes creyeron notar en el conductor síntomas de estar bajo los efectos del alcohol, por lo que le realizaron un control de alcoholemia que arrojó 0,29 mg. por aire expirado (0,15 es el máximo para conductores noveles). Su acompañante, con una bebida alcohólica en la mano, se ofreció a llevar el coche. Sin embargo, cuando le hicieron soplar, arrojó un resultado de 1,12. Así que, naturalmente, el coche quedó inmovilizado.

En Carballo fue neutralizado un ciclista que circulaba por el carril contrario, sin luces, ni casco. También tenía una apreciable tasa de alcohol: 0,44 (0,25 es el máximo para conductores no noveles), por lo que fue denunciado. Cerca de A Coruña, una patrulla inmovilizó un taxi en el que viajaba un padre con tres menores que vieron con estupor como el taxista daba una tasa de 0,40 cuando le hicieron el control de alcoholemia por lo que tuvieron que pedir otro taxi.

También en A Coruña, los agentes debieron emplearse a fondo con un conductor que, al ver el control, dio la vuelta siendo perseguido por una patrulla. El conductor acabó estrellándose contra un bolardo que no pudo frenar su carrera, ya que siguió huyendo con el bolardo incrustado. Dio 0,46 en el control. Su permiso de conducir solo tenía 11 días de antigüedad.