El juez Taín se suma al Camino de los Valores dirigido a menores condenados
GALICIA
El proyecto, impulsado por una jueza canaria, busca que los jóvenes con problemas puedan reintegrarse en la sociedad
06 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.«Se trata de ofrecer una salida a los muchísimos chavales que tienen interés en abandonar el mundo marginal en el que viven. Muchas veces el problema que tienen se lo genera ese ambiente con el que conviven a diario». El juez José Antonio Vázquez Taín explica los objetivos del proyecto UP2U Depende de ti, en el que se ha embarcado para ayudar a menores condenados o que se encuentren en riesgo de exclusión social.
El proyecto se enmarca dentro del Camino de los Valores, un proyecto puesto en marcha por la jueza canaria Reyes Martel y que este año cumple su tercera edición y que busca la reeducación de los menores y fomentar la convivencia y la solidaridad entre ellos. «Es un proyecto que merece mucho la pena», afirma Taín, actualmente magistrado titular del Juzgado de lo Penal número 2 de A Coruña.
Todo empezó con 19 jóvenes
El proyecto se inició a finales de octubre del 2017 con 19 jóvenes canarios que habían sido sentenciados por el Juzgado de Menores número 1 de Las Palmas, que precisamente dirige Reyes Martel. Esos menores recorrieron 45 kilómetros del llamado Camino Canario y cumplieron una condena innovadora, acompañados por sus familiares, con los que habían roto muchos vínculos.
Este mes se pondrá en marcha otra edición del Camino de los Valores. Se inicia en Gran Canaria. Será como un campamento en movimiento al que seguirá el Camino Gallego, que se desarrollará en septiembre para recorrer unos 75 kilómetros del Camino Inglés entre A Coruña y Santiago.
Pide ayuda a las empresas
«Estamos contactando con empresas y entidades para que se comprometan con esta iniciativa solidaria», explica el juez Taín, de forma que a los menores se les puedan plantear ofertas para que puedan trabajar o formarse mientras cumplen las medidas impuestas en la sentencia. «Y sobre todo, para conseguir que los chavales no queden abandonados cuando cumplen la sentencia. Queremos completar esa segunda fase de forma que puedan seguir colaborando con la asociación y seguir formándose con becas de estudios o formación que les permita reintegrarse a la vida», concluye Taín.