El ADN permite a la policía saber la edad, el color de ojos y el lugar en el que nació un sospechoso

José Manuel Pan
José Manuel Pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

LA ESCENA DEL CRIMEN La Policía Científica recreó en su exposición de A Coruña el escenario de la investigación de un asesinato, con las pruebas, las mediciones policiales e incluso el cadáver
LA ESCENA DEL CRIMEN La Policía Científica recreó en su exposición de A Coruña el escenario de la investigación de un asesinato, con las pruebas, las mediciones policiales e incluso el cadáver J. M. PAN

El profesor Carracedo asegura en un foro de ciencia forense que una sola mancha de saliva revela características físicas de una persona

24 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Una botella, un cuchillo, un teléfono móvil. Son objetos que aparecen en el escenario de un crimen recreado por la Policía Nacional para la muestra que expone (hoy viernes es el último día) en la Fundación Barrié de A Coruña. Son material suficiente si de ellos se puede obtener algún tipo de muestra biológica, una huella, una mancha de sudor, restos de saliva. Si se puede conseguir eso, las posibilidades de identificación son muy elevadas gracias a los avances en el ADN. Así lo aseguró ayer en A Coruña el profesor Ángel Carracedo, uno de los mayores expertos internacionales en genética y colaborador destacado de las fuerzas de seguridad de todo el mundo en la investigación de crímenes sin resolver.

Carracedo dijo que el ADN supuso una revolución y que aprender a secuenciarlo fue un descubrimiento que abrió enormes posibilidades para entender las enfermedades. Pero quiso destacar su aportación a la medicina forense: «Foi unha revolución total, de non poder facer case nada a poder facer case todo». El profesor reconoció que estamos lejos de conseguir el retrato robot de un determinado sospechoso, pero aseguró que sí se puede conocer el color de sus ojos y de su piel, saber si tiene el pelo rizo o liso y conocer su edad, «cun erro de máis ou menos tres anos», y su origen geográfico, es decir, su lugar de nacimiento.

Destacó los avances en el fenotipado forense por ADN, un proceso que permite conocer, a partir de una muestra de contacto como una mancha de saliva, de sangre o de esperma, las características físicas de una persona. «Neso estamos progresando moito», aseguró Carracedo: «É como un testemuño biolóxico que pode axudar á policía cando non hai un sospeitoso e poder orientar unha investigación». Reveló que esa técnica de identificación la aplicó su equipo por primera vez en los atentados del 11-M en Madrid. También sirvió para localizar al autor de la muerte de Eva Blanco en Algete. Las muestras de ADN lograron identificar las características del asesino, saber que era marroquí y detenerlo 18 años después del crimen. También se empleó en una investigación de Scotland Yard para esclarecer una violación en serie en el Reino Unido.

En las jornadas policiales también participó el magistrado José Antonio Vázquez Taín, quien hizo un repaso a las técnicas de investigación a través de los años antes de dirigirse al auditorio, en su mayoría policías, para recomendarles claridad y transparencia en los informes que dirigen a los jueces para pedir medidas de investigación, como por ejemplo pinchazos telefónicos. «Los especialistas son ustedes, los policías, que son nuestros ojos y nuestro olfato», les dijo. Taín incidió en ese extremo porque, explicó, a partir de esos informes los jueces autorizan o no la ampliación de las investigaciones.