Crece un 20% el número de personas que viven solas a partir de los 40 años

Mónica Pérez Vilar
MÓNICA P. VILAR REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Ya son 38.000 más que en el 2013. Sin embargo, baja el número de jóvenes que forman hogares unipersonales

12 nov 2019 . Actualizado a las 20:18 h.

Bien porque las circunstancias obligan a ello o por deseo personal, el vivir sin compañía es un fenómeno en auge. En 278.600 de los más de un millón de hogares gallegos solo reside un persona. Son datos extraídos de la Encuesta Continua de Hogares que elabora el INE (Instituto Nacional de Estadística), y que revela que en los últimos cinco años este tipo de hogares unipersonales ha crecido más de un 11 %, sumando casi 28.000 casos desde el 2013.

La subida no afecta por igual a todos los tramos de edad. De hecho, entre los jóvenes se produce justo el efecto contrario. Si en el 2013 vivían solas un total de 55.200 personas menores de cuarenta años, los datos del 2018 descienden hasta las 45.200. La caída más fuerte se registra en el tramo de 35 a 39 años, en el que cada vez más gallegos que optan por vivir con sus padres, en pareja, con sus hijos o incluso con compañeros de piso con los que no tienen parentesco.

Sin embargo, la soledad aumenta en prácticamente todos los intervalos de edad a partir de los 40. El INE recoge que un total de 233.400 personas por encima de esa edad hacen su vida sin compartir vivienda con nadie. En el 2013 esa realidad apenas superaba los 195.000 hogares. La subida en solo cinco años ha sido del 20 %.

El mayor número de solitarios se registra entre los 65 y los 69 años, rozando los 30.000 aunque la diferencia con respecto a otras etapas de la vida no es mucha. De los 70 a los 79 años y por encima de los 85 también se superan los 25.000 casos. Llama la atención el dato correspondiente a las personas entre 80 y 84 años, ya que el número de solitarios se ha reducido. Si en el año 2016 alcanzaban su máximo del lustro, con 30.400 personas viviendo sin compañía, en el 2018 se registraron solo 19.500, lo que supone un descenso del 35 % en dos años.

En cuento al tramo de edad con menos hogares unipersonales, corresponde a los gallegos que estrenan la veintena. Únicamente 1.400 personas de entre 20 y 24 años viven solas en Galicia. La demografía y la situación económica pueden explicar esta baja cifra.

El perfil de la soledad

¿Cuál es el perfil de la persona que vive sola en Galicia? Aunque la casuística es variada, existen rasgos predominantes. Por ejemplo, la soledad les toca más a ellas. Un total de 155.300 gallegas no comparten su hogar con nadie. La misma situación afecta a 123.300 hombres. En concreto, son las féminas de más de 85 años las que componen el bloque principal de los solitarios (son casi 20.000). La inmensa mayoría son de nacionalidad española y están viudas.

El mayor número de quienes viven solos lo hace en un edificio de diez o más vecinos y en una vivienda de su propiedad que ya está pagada. Solo 76.500 personas se permiten no compartir casa en una vivienda alquilada o aún por pagar.

El solitario tipo reside en algún municipio de entre 100.000 y 500.000 habitantes. Es decir, entre Vigo, Ourense y A Coruña acumulan 83.200 personas que viven solas.

Por estado civil, el grueso de los que residen sin compañía son solteros (112.100). Otros 89.300 son viudos. Más de 57.000 están separados o divorciados y 19.600 son casados que no conviven con su pareja.