La Xunta taladra As Catedrais con sus carteles de aviso

José Francisco Alonso Quelle
josé alonso RIBADEO / LA VOZ

GALICIA

Colocación de las señales de peligro en las cuevas de la playa de As Catedrais.
Colocación de las señales de peligro en las cuevas de la playa de As Catedrais. PEPA LOSADA

Medio Ambiente señaliza los 30 lugares más peligrosos a dos días de activar el cupo y limitar el acceso a 4.812 personas diarias

10 abr 2019 . Actualizado a las 11:36 h.

A las dos de la tarde, bajo unas tímidas gotas que preludiaban lluvia, un operario encaramado a una escalera taladraba un acantilado de la playa de As Catedrais, en Ribadeo. Mientras, un compañero cogía los clavos que sujetarían otro cartel más advirtiendo del riesgo de desprendimientos. Continuaban así una labor iniciada a media mañana, en el sendero que bordea el precipicio de 30 metros de altura. Siguieron por cuevas, las grutas... Hoy esperan rematar la faena.

Esa imagen insólita era la demostración del paso adelante dado por la Consellería de Medio Ambiente ante la inacción de la Dirección General de Costas en As Catedrais. Hasta ahora, en As Catedrais todo seguía prácticamente igual un año después de la muerte de una joven turista leonesa al golpearle en la cabeza una piedra que cayó en una cueva.

A las puertas de una nueva Semana Santa, a dos días de que se active el plan de protección por el cual, ante la previsible afluencia de miles de visitantes, solo se permitirá el acceso a la playa de 4.812 personas al día, la Xunta ha decidido señalizar los lugares más peligrosos tras pedirle sin éxito a Costas que actuase. Lo ha hecho, sin embargo, recurriendo a un sistema cuando menos discutible: clavando las señales directamente sobre el monumento natural.

Son señales de advertencia. No hay ninguna de prohibición, más allá de los carteles que hay en el acceso a la playa, y que son sistemáticamente ignorados por los visitantes. Lo habitual es ver a gente subida a los peñascos, asomándose a los acantilados o desatendiendo los carteles que advierten de sanciones de hasta 6.000 euros por acceder al sendero que bordea la playa.

En Semana Santa y verano, con el plan de protección de As Catedrais activo, una empresa contratada por la Xunta se encarga de controlar el acceso y de velar por el respeto de las normas. Esta Semana Santa ese personal será reforzado, según anunció Medio Ambiente. Pero el resto del año, sin vigilancia, lo cierto es que muy pocos se ciñen a la normativa. Tras la reciente sentencia judicial que exime a la Xunta de la responsabilidad en la muerte de la joven turista, el refuerzo de las señales de advertencia ha sido la medida de mayor calibre adoptada en As Catedrais. Lejos queda la solicitud que en su día hizo la Xunta a Costas de que prohibiese el acceso a las grutas, a las cuevas y a los icónicos arcos.

A partir de este viernes será preciso disponer de un pase para entrar en As Catedrais. Se puede obtener gratuitamente en la web ascatedrais.xunta.gal. A estas alturas, para el miércoles se han retirado ya unas 1.300 entradas. El día de mayor demanda es el Viernes Santo, para cuando solo quedan 1.500 disponibles. Lo habitual es que Jueves, Viernes y Sábado Santo se agoten.