«En Galicia hay gente sin formación cuidando de niños con necesidades especiales»

Gladys vázquez REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

EUROPA PRESS

Los auxiliares denuncian que no se exige una titulación específica

05 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Se sienten invisibles. Su profesión no cuenta con una formación específica y tampoco sienten que el grupo de funcionarios en el que se les va a agrupar reconozca su labor. En Galicia son más de 600 las personas que trabajan como auxiliares cuidadores. Son los profesionales que atienden a los pequeños con necesidades educativas especiales. Mañana se concentrarán frente a San Caetano para pedir una solución a un problema que dicen arrastrar desde hace décadas. Una reivindicación que surge tras haber conocido que se los adscribirá al grupo C2. «Se nos mete en una categoría que pide como requisito de acceso el graduado en ESO», dice Carmen Pereira, presidenta de Asate, colectivo que representa a más de 200 de estos profesionales, que reclaman ser denominados auxiliares técnicos educativos. Sienten que hay reticencias a la hora atender sus demandas, por parte tanto de la Xunta como de los sindicatos. «Nos han llamado padres preguntando qué pueden hacer cuando les han mandado para que atienda a su hijo una persona que no tiene ni idea», explica.

Los auxiliares cuidadores son aquellos que apoyan, por ejemplo, a niños autistas o con problemas de comportamiento. «Tienes que tener un mínimo de formación específica. Enseñamos el acceso de los niños a los baños, técnicas de control de esfínteres o de comportamiento. Hacemos un apoyo en el aula y somos para ellos una referencia. Nadie los conoce ni sabe llevarlos como nosotros», dice Pereira. Piden que se ponga sobre la mesa de negociación una hoja de ruta para ajustar laboral y legislativamente su profesión, pero también que se reconozca el carácter educativo de sus funciones. «No hacemos función docente, pero sí ayudamos en la educación de los chavales. Si enseño a un niño a comer, le estoy educando. Si le digo cómo respetar a sus compañeros, también».

Estos profesionales apuntan además a que en lo suyo hay intrusismo cuando el camino trazado es que los niños con necesidades especiales estén escolarizados en los centros ordinarios. «Hay gente en las listas sin experiencia, sin formación, cuidando de estos niños. Es hora de que se nos reconozca una formación profesional especializada y la calificación de la profesión, como en otras comunidades».

Desde Función Pública explican que Xunta y sindicatos han alcanzado un acuerdo para ofrecer al personal que ya es fijo la posibilidad de convertirse en funcionarios con escalas equivalentes a las categorías de personal laboral ya existentes. Se deben exigir las mismas condiciones de acceso que se les pidió cuando accedieron a la plaza. Endurecer las condiciones sería una discriminación laboral al personal laboral que ya es fijo.