Hasta tres años de espera y 3.000 casos atascados en Santiago
El cuarto juzgado de lo social que el Gobierno central finalmente ha aceptado crear en Santiago es una urgente necesidad y una demanda unánime de jueces, abogados, procuradores, funcionarios y partidos políticos desde hace ya cinco años. La razón, según informa Xurxo Melchor, es que estas salas son las segundas que más carga de trabajo soportan en Galicia, solo después de las de esta misma jurisdicción en Vigo.
El exceso de asuntos ingresados anualmente ha hecho que haya unos 3.000 atascados en los juzgados de lo social compostelanos. Cada año, reciben una media de 1.200 cada uno de ellos, cuando el límite fijado por el Consejo General del Poder Judicial es de 800. Una vez entre en funcionamiento la nueva sala, los 3.600 casos anuales que atienden se repartirán entre cuatro, por lo que tocarán a 900 cada una, aún por encima de lo recomendado. El colapso ha hecho que los retrasos lleguen a los tres años en las reclamaciones de salarios adeudados a trabajadores o en las incapacidades laborales.
Además de en social, en Santiago también está colapsado el juzgado de primera instancia que recibe los asuntos de familia y los de lo contencioso-administrativo. En ambos llega a haber esperas de más de dos años para dictar sentencia.