La Xunta no ve útil ahora mismo pedir el traspaso del tráfico y el despliegue de una policía propia

Domingos Sampedro
Domingos Sampedro SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

CESAR QUIAN

Santiago Villanueva en el Parlamento: «Temos satisfeita de forma razoable as necesidades dos galegos en esta materia»

06 feb 2019 . Actualizado a las 13:04 h.

El acuerdo político alcanzado a instancias del PP hace quince días, consistente en reivindicar para Galicia el mismo techo competencial que tiene Cataluña y el País Vasco, fue sometido este miércoles a un nuevo test de estrés que no logró superar. El BNG quiso sondear hasta dónde estaba dispuesta a ir la Xunta y acudió a la comisión institucional del Parlamento con una petición para desarrollar la inaplicada Lei 8/2007 de la Policía de Galicia y reclamar para este cuerpo el traspaso de la competencias de tráfico. La respuesta del Gobierno gallego fue nítida. Activó de inmediato el freno de mano y, a través del director xeral de Emerxencias, Santiago Villanueva, dejó claro que no considera útil ahora mismo asumir el control de estas nuevas materias.

El diputado nacionalista Luís Bará aclaró que con su pregunta parlamentaria pretendía comprobar si el consenso auspiciado por el PPdeG para reclamar el tope competencial para Galicia era real o un simple «xesto de cara a galería». Por eso escogió dos ámbitos que tienen transferidos el País Vasco y Cataluña, aparte de Navarra, como son la policía propia y el tráfico, para ver si desde la Xunta había disposición a avanzar en la misma dirección.

Y la respuesta fue negativa, al menos por ahora. Santiago Villanueva dejó la puerta abierta a nuevas competencias, «pero sempre que sexan útiles», condición que no cumpliría en estos casos. «O Goberno de Galicia entende que actualmente temos satisfeita de forma razoable as necesidades dos galegos en materia de seguridade e de tráfico», subrayó el director xeral de Emerxencias, que puso un especial énfasis en defender que las nuevas competencias solo de deben asumir si es para prestar un mejor servicio y si viene dotada de recursos económicos. «Nin unha soa competencia nova se non ven co financiamento necesario», recalcó Villanueva, antes de añadir que Galicia cuenta desde 1992 con una unidad adscrita de la Policía Nacional, «que leva xa 27 anos desempeñando o seru servizo de xeito satisfactorio».

En cuanto al control del tráfico y la seguridad vial, que el BNG justificó en la existencia de elementos diferenciales como la orografía o la dispersión, Santiago Villanueva indicó que la siniestralidad viaria no era superior en Galicia, sino que «está na media estándar que se pode aplicar a España», con una evolución similar al resto de los territorios. Y añadió, en consonancia con la línea trazada por el presidente de la Xunta, que antes de la seguridad o el tráfico hay otras «necesidades máis inmediatas que se deben cumprir», como es el incremento de la inversión gallega en el proyecto de Presupuestos del Estado, el traspaso de la titularidad de la autopista AP-9 o el incremento de los efectos de la unidad policial adscrita.

«Quédanos claro que aplica a marcha atrás nesta cuestión», respondió a su vez el diputado Luís Bará, que atribuye el repliegue de velas en la posición defendida desde la Xunta a que al presidente Feijoo «déronlle un toque dende Madrid». Santiago Villanueva no quiso entrar en esta interpretación, y re remitió a lo ya dicho: «Non renunciamos a novas competencias, pero sempre que sexan útiles e financiadas».