Redes de narcos utilizan el borrador del correo electrónico para comunicarse

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

GALICIA

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Se realiza con relativa frecuencia y complica enormemente los rastreos

02 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Mensajes a través de aplicaciones como WhatsApp o Telegram, pero también mediante correos electrónicos. Las redes de narcotraficantes que operan en las Rías Baixas siempre tratan de sacar el mayor provecho de los avances tecnológicos para tratar de burlar a las fuerzas del orden. Si mediante las aplicaciones de mensajería móvil trataban de valerse de sus sistemas de encriptado, en los últimos tiempos parece que algunos entramados han optado por un nueva estrategia que pivota en torno a los e-mails.

Ya no se trata de que unos y otros se intercambien mensajes, algo que es relativamente fácil de investigar en la actualidad mediante exhortos a las operadoras de telefonía o a los titulares de los servidores que albergan los correos electrónicos, sino que se opta por valerse de la funcionalidad de la opción de borrador. De este modo, los narcos escriben un mensaje, pero no lo envían sino que lo guardan en el propio correo para que, posteriormente, sea leído por otra persona que entra en esa cuenta y, acto seguido, borrarlo.

Es algo que, según sospechan distintas fuentes en la Guardia Civil y la Policía Nacional, se realiza con relativa frecuencia y que complica enormemente los rastreos. Y es que, según añaden, a diferencia de los mensajes que sí se envían, de estos no quedan indicios cuando se eliminan del correo electrónico.

De hecho, esto es algo que ha podido comprobar la Guardia Civil recientemente en el marco de un operativo antidroga llevado a cabo en el marco de un sumario abierto desde el 2015 en la provincia de Pontevedra. Tal y como consta en un auto judicial, los investigadores constataron un encuentro entre dos sospechosos en el transcurso del cual uno de ellos facilitó a su interlocutor una dirección de correo electrónico y la clave para, acto seguido, indicarle que «se comunicarán a través del borrador».

«Un medio muy seguro»

Ya en esa conversación, ambos sospechosos coinciden en reconocer que se trata de un «medio muy seguro» para tratar de esquivar una posible investigación policial. Lo cierto es que, a la vista de estas informaciones recabadas por los agentes del instituto armado, se requirió a la empresa que albergaba este correo electrónico que se facilitar todas las informaciones relacionadas con su conexión. El resultado frustró todas las expectativas de los investigadores.