Almuíña alerta de que el déficit de médicos seguirá hasta el 2030 si no se toman medidas urgentes
GALICIA
El Sergas culpa al Ministerio, y este responsabiliza a las comunidades de la falta de profesionales
23 ene 2019 . Actualizado a las 22:24 h.El déficit de médicos está lejos de solventarse. La ministra de Sanidad presidió en Madrid la comisión de recursos humanos del Sistema Nacional de Salud con un punto estrella, la falta de facultativos, sobre todo en algunas especialidades. En la reunión se dieron a conocer a los consejeros las conclusiones de un informe sobre la oferta y demanda de médicos durante el período 2018-2030 que, según Diario Médico, recoge que dadas las previsibles jubilaciones, el déficit de especialistas será en el año 2025 de un 12 %, cifra que se mantendrá hasta el 2030.
Lo paradójico es que mientras faltan profesionales formados, en el 2026 habrá en España una bolsa de 2.500 graduados en Medicina que no se habrán especializado. ¿Por qué? Porque el número de plazas en las facultades supera ampliamente al número de plazas mir. Este déficit es palpable en Galicia. Vázquez Almuíña alertó de que la falta actual de médicos «será más importante que la actual por lo menos hasta el 2030, y sobre todo en las especialidades de familia y pediatría». Y es que los facultativos que empezaron a trabajar a finales de los 70 y principios de los 80 se jubilarán en bloque y los que se están formando no son suficientes para sustituirlos.
De quién es la culpa no ha quedado muy claro. La ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, sostiene que el estudio elaborado sobre la oferta y demanda de médicos concluye que las condiciones de trabajo están detrás de los déficits en algunas especialidades. «Plazas poco atractivas en lugares remotos o alejados de grandes núcleos, y contratos temporales precarios explicarían las causas del problema», apunta. Es decir, son las comunidades las responsables, por no ofrecer condiciones atractivas a sus médicos. Pero el conselleiro de Sanidade tiene una visión contrapuesta, ya que el principal malestar en la atención primaria se debe a que no se pueden cubrir bajas porque no hay profesionales, «y esto no se palía solo con medidas a nivel de comunidad».
Eliminar la tasa de reposición
Almuíña reclamó por ello a Madrid dos medidas urgentes que son competencia estatal: una convocatoria extraordinaria del mir de médicos de familia, y elevar la tasa de reposición para convocar ofertas de empleo público que puedan superar a las vacantes que se producen por jubilación. Actualmente el Gobierno central ha autorizado una tasa del 100 %, que en Galicia llega al 108 % por haber cumplido los objetivos de déficit, pero para Almuíña no es suficiente, por lo que reclama al Ejecutivo central que elimine este porcentaje y permita a Galicia convocar todas las plazas de médicos que precise.
Más plazas mir, prórrogas de jubilaciones e incentivos para los lugares poco atractivos
El próximo 2 de febrero se realizan en toda España los exámenes de formación sanitaria especializada, es decir, los famosos mir, fir, bir o eir. En total habrá para los alumnos que se presenten 8.402 plazas, 360 más que en el 2018, de las que la mayoría, 6.797, son para médicos.
Una de las quejas de la Xunta es que ha solicitado al Ministerio que acredite unidades docentes -para poder formar a los mir-, ya que sin estas unidades no puede ampliarse el número de residentes que vienen a la comunidad. Precisamente la ministra de Sanidad ha asegurado que está llevando a cabo una ronda de contactos con todas las autonomías para resolver expedientes de solicitud que en algún caso estaban acumulados desde el año 2012, «a día de hoy hemos liberado 666 plazas más para la convocatoria 2019-2020, entre ellas 401 nuevas para médicos», explicó. Galicia, por ejemplo, ha pedido ampliar de 20 a 26 el número en pediatría, lo que permitiría que cada año acabasen su período de residencia 26 nuevos profesionales. Ministra y consejeros acordaron también prorrogar la edad de jubilación, algo que en Galicia ya está vigente, y establecer medidas para incentivar que los mir se vayan a puestos poco atractivos al finalizar la residencia.