El jurado declara culpable al acusado de matar a un amigo de 57 puñaladas

Antonio Longueira Vidal
toni longueira CARBALLO / LA VOZ

GALICIA

CESAR QUIAN

Cree que no debe tenerse en cuenta como eximente que Rama Vázquez actuó drogado

18 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Juan Bautista Rama Vázquez, de 46 años y vecino de Carballo, es culpable. Así lo determinaron ayer por la tarde los nueve integrantes del jurado popular, que lo han juzgado en la Audiencia Provincial de A Coruña por el denominado crimen de Bértoa. Un vecino de Malpica, Óscar Manuel Mato villar, de 43 años y amigo del acusado por ser ambos toxicómanos, murió sobre las ocho y veinte de la tarde del 8 de diciembre del 2017 tras recibir 57 puñaladas, algunas de ellas defensivas, realizadas con un cuchillo de cocina de 19 centímetros de hoja. Ahora será un magistrado de la Audiencia Provincial el que fije la condena.

La Fiscalía y la acusación particular solicitaron en sus conclusiones definitivas 22 años y medio de cárcel para el acusado, que lleva en prisión preventiva desde que fue arrestado, la misma tarde de los hechos. Veinte años por asesinato y dos años y medio por tenencia ilícita de armas, al serle decomisada, además, una pistola detonadora modificada para disparar balas. Ambas partes consideran que Juan Bautista Rama Vázquez quedó con la víctima «para darle un escarmiento», ya que la víctima le había reclamado más droga de la inicialmente pactada, tras ir juntos el día 5 de diciembre a Ferrol a comprar una gran cantidad de estupefacientes. Según la Fiscalía, Juan Bautista Rama actuó con ensañamiento y ganas de causar el mayor dolor posible a la víctima. Esta tesis ha sido compartida por el jurado popular, que considera que no hay que tener en cuenta como eximente que el condenado, que se declaró culpable desde el primer momento, actuó bajo los efectos de las drogas.

Precisamente, la defensa solicitaba «la total eximente o, subsidiariamente, la parcial», al entender la abogada Miren Amesti Montes, que su defendido actuó de esta forma por «una intoxicación prolongada y acusada de drogas». Aquel 8 de diciembre del 2017 y los tres días anteriores, había consumido una gran cantidad de heroína, cocaína y hachís, todo ello mezclado con una gran cantidad de alcohol. La letrada entendía además que a Juan Bautista Rama no se le realizó ningún tipo de prueba toxicológica cuando fue arrestado por agentes de la Policía Local de Carballo. De hecho, Miren Amesti apuntó durante el juicio que el informe de imputabilidad de los forenses se realizó tres meses después de haberse producido el brutal crimen y que la primera declaración efectuada por los forenses se le realizó cuando estaba bajo los efectos del síndrome de abstinencia.